ESTACIÓN CENTRAL DE MICHIGAN
Este edificio, construido en 1914, refleja perfectamente el esplendor perdido de Detroit con su estilo Beaux-Arts.
Construido en 1914, este edificio es uno de los grandes símbolos de la ciudad. Imponente tanto en tamaño como en estilo, refleja perfectamente el esplendor perdido de Detroit. Su estilo de Bellas Artes fue diseñado por Warren & Wetmore y Reed & Stern, también autores de la New York Central Station. Sin embargo, esta magnífica estación ha sufrido un triste destino, en gran parte debido a su ubicación. Los pensadores del proyecto querían que estuviera descentrado para desarrollar el distrito de Corktown. Pero rápidamente la gran depresión de 1929, combinada más tarde con la supresión de los tranvías en la ciudad que permitía a los residentes llegar a la estación, precipitaría su cierre. Tan pronto como terminó la Segunda Guerra Mundial, sus propietarios intentaron venderla, pero no pudieron encontrar compradores. En 1970, la compañía ferroviaria Amtrak decidió reanudar la explotación de la estación, pero esto sólo duró un tiempo. En 1988, un último tren salió de los andenes de la Estación Central de Michigan, dejando la estación abandonada, aunque adquirida por la familia Moroun en la década de 1990. Sólo se han llevado a cabo algunas obras, en particular para instalar nuevas ventanas en el edificio, a la espera de una verdadera renovación. En 2009, el ayuntamiento incluso aprobó una resolución para demolerlo. Pero el 11 de junio de 2018, después de meses de rumores, el anuncio oficial salió en los titulares: Ford Motor Company se convierte en el propietario y ocupante de la Estación Central de Michigan. Un proyecto de desarrollo a seguir!