PARQUE NACIONAL CIRCEO
El Parque Nacional del Circeo tiene una gran variedad de paisajes y unas vistas increíblemente bellas.
Creado en 1934, el Parque Nacional del Circeo es un increíble mosaico de naturaleza e historia a sólo una hora en coche al sur de Roma. El parque se extiende entre la tierra y el mar. A pesar de su tamaño relativamente pequeño (9.000 hectáreas), incluye paisajes de gran variedad y vistas de increíble belleza. Hay cinco entornos: el promontorio del monte Circeo, cuyo perfil recuerda al de la maga Circe que, según el mito, hechizó a Ulises; 27 kilómetros de playas y dunas de arena blanca; cuatro lagos costeros; más de 3.000 hectáreas de bosque; y la pequeña isla de Zannone, un santuario de aves.
Además de su belleza natural, el Parque del Circeo tiene interés histórico. El descubrimiento de un cráneo de un hombre de Neanderthal de hace 60.000 años en una cueva de la costa es una prueba de la presencia humana en la zona desde la prehistoria. Los restos de una villa romana, atribuida al emperador Domiciano, también dejan boquiabiertos a los visitantes. A la gran diversidad de ambientes se suma una fauna y flora especialmente ricas, entre las que destacan los grandes bosques de encinas, hábitat ideal para jabalíes, gamos y liebres. Abundan las aves y los reptiles. Aunque la zona estuvo amenazada por la especulación inmobiliaria desde los años 40 hasta los 60, en los 80 el parque había recuperado su aspecto original. En temporada, hay muchas actividades, desde el senderismo hasta la visita a los lugares más bellos.