RAMADA BY WYNDHAM * * * *
Cómo llegar y contactar
Hotel-bar-restaurante panorámico con habitaciones, estudios y suites con terraza.
Este bello establecimiento vertical acoge a una amplia gama de huéspedes internacionales y locales de negocios y de ocio en un hermoso vestíbulo oceánico y en sus 130 alojamientos, habitaciones, estudios y suites. Aire acondicionado, TV con canales por satélite y conexión a Internet en todas las habitaciones, Spa. Algunas habitaciones son adecuadas para estancias más largas, ya que están equipadas con una cocina. Las habitaciones y los estudios tienen una terraza de 10 m² cada uno. Estas últimas tienen vistas al hipódromo o a la laguna. Restaurante panorámico y giratorio Le 360°.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre RAMADA BY WYNDHAM
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
アンスバタ地区の海辺からは気持ちちょっと歩くけど、宿泊には大満足なホテルなのでオススメします。
泊まった階は忘れましたが景色はとてもよく、海岸沿いにあるホテルと比べても遜色はないと思います。またスタッフの方の対応は一番印象良くて、つたない英語もしっかり聞いて対応してくれたので言葉に不安がある方にオススメできます。
- Everything was spacious & reasonably clean
- There was a washer (no dryer) & it's one of the reasons we went for it
- Two balconies, one with seaview
- Good Internet with generous 30G/day allowance
- Perfect location within walking distance to beach, restaurants, supermarkets, car rentals, etc
- Very nice, friendly & helpful staff
- Functional gym with some old equipment & weights
- Swimming pool was OK
For the not too positive side:
- Dated apartment in need of a renovation
- Lighting throughout the apartment was dim, not sufficient to do work or reading
- Bathrooms towels & bed linens were pretty old & worn out
- There're cockroaches but no insect spray (even when asked at reception)
It's a great apartment hotel with some minor issues that could be easily fixed.
Expérience catastrophique au Ramada. À peine arrivés, on nous change d’étage sans raison valable : adieu la belle vue du 16e étage, bonjour la cour intérieure glauque du 4e. Le pire ? Un luminaire nous est littéralement tombé sur la tête ! Aucun mot d’excuse, aucune réaction du personnel.
La salle de bain ? Un sketch : un énorme trou entre la baignoire et la vitre de la douche, bonjour les inondations. Ils avaient promis de venir nous chercher à l’aéroport — on les attend encore. Pour couronner le tout, ils nous ont facturé une nuit en trop et ont refusé de nous rembourser malgré les preuves.
Service déplorable, gestion inexistante, sécurité douteuse. Ramada ? Plutôt Ramalheur. Je déconseille fortement