BAR ATAKPAMÉ SOIR
Llegando desde Kpalimé, no se puede pasar por alto el gran cartel verde que indica en letras mayúsculas el nombre del establecimiento. En contra de lo que se podría pensar, no hay conciertos ni veladas de animación. Es simplemente un gran maquis local que sirve una generosa comida casera a la hora de comer. Al abrigo de transeúntes y automovilistas, la pequeña terraza es un lugar agradable para sentarse. El fufu, la pintada, el pollo y el cordero se cocinan a la manera tradicional, en hornos de barro para las carnes, en un mortero de madera para la pasta de ñame.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre BAR ATAKPAMÉ SOIR
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.