CASTILLO DE EGGENBERG (SCHLOSS EGGENBERG)
El castillo alberga espléndidas pinturas que representan los orígenes del mundo, desde la Antigüedad hasta el comienzo de los tiempos modernos.
No hay que perderse. Situado en el oeste de la ciudad, el castillo fue encargado por el consejero imperial de Fernando II, Hans Ulrich von Eggenberg, y construido entre 1625 y 1656. Obra del arquitecto Giovanni Pietro de Pomis. El castillo tiene 365 ventanas, 31 habitaciones en cada planta, 24 salas de ceremonias con 52 puertas y 4 torres en las esquinas que evocan la medición del tiempo: horas, estaciones, semanas, días y minutos. El calendario gregoriano se adoptó 40 años antes. El interior del castillo es de estilo barroco y rococó. Es el castillo más grande de Estiria y es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde agosto de 2010. Durante la visita al palacio, podrá explorar los interiores, donde algunas habitaciones conservan su mobiliario original. No se pierda las espléndidas pinturas que recorren los orígenes del mundo, desde la Antigüedad hasta el comienzo de los tiempos modernos. También es magnífica la Sala de los Planetas, con pinturas de los doce signos del zodiaco.
Hay varios museos en el castillo. La Galería Antigua(Alte Galerie) nos sumerge en el arte medieval, muy piadoso, antes de pasar a obras más diversas del Renacimiento y el Barroco. La exposición finaliza con pinturas neoclásicas de los maestros de finales del siglo XVIII. El Museo de Arqueología (Archäologiemuseum) presenta una serie de objetos (más de 1220), los más emblemáticos de los cuales datan de la Edad de Bronce. Esta exposición altamente educativa es de interés tanto para adultos como para niños. Por último, elMünzkabinett alberga una exposición permanente con una sección que presenta las monedas en circulación desde la Antigüedad hasta el siglo XVIII, mientras que la otra sección presenta la vida de Balthasar Eggenberger, el financiero que permitió a la familia Eggenberger convertirse en una de las casas más poderosas de la época. Los jardines también son imprescindibles. Tómese su tiempo para pasear y disfrutar de los diferentes paisajes, desde el parque inglés hasta los jardines barrocos. No se pierda el Jardín Planetario, completamente recreado en 1999 sobre el tema de la astrología. Una joya!
Si quiere ver la rosaleda en plena floración, planifique su visita entre finales de mayo y principios de junio. Y si quiere saber más sobre las rosas y sus diferentes especies, se ofrece una visita guiada sobre su historia, cultivo, cuidados...