MEMORIAL DE MAUTHAUSEN

El campo de Mauthausen fue construido en 1938 por prisioneros de Dachau. Clasificado como campo de "nivel III", las condiciones de detención eran especialmente duras y la tasa de mortalidad era muy alta. Los prisioneros trabajaban en la producción de materiales de construcción para la Alemania nazi. Cerca de allí se encuentra la enorme cantera de granito excavada por los prisioneros con sus llamadas "escaleras de la muerte" con sus diminutos escalones que hacían muy difícil la subida, especialmente con una carga de 60 kg a la espalda.

A partir de 1941 se crearon alrededor del campo principal unos 40 campos anexos para el encarcelamiento de polacos, soviéticos y húngaros, así como de franceses, italianos, españoles y yugoslavos. A partir de mediados de 1944, muchos prisioneros de los campos del este, así como de los campos anexos, fueron deportados a Mauthausen, lo que provocó un terrible hacinamiento. En total, 200.000 personas fueron deportadas a Mauthausen. La mitad de ellos murieron. El campo fue liberado en mayo de 1945 por el ejército estadounidense.

Después de la guerra, los soviéticos la utilizaron como lugar para alojar a sus tropas, antes de que Austria se hiciera con ella en 1947. En 1949 se inauguró un monumento conmemorativo. Posteriormente, muchos países erigieron sus propios monumentos. En 1960, se creó un gran cementerio para las víctimas del campo y se enterraron allí cerca de 140.000 cuerpos. Finalmente, en 1970, se abrió un museo para preservar la memoria de los crímenes. Una visita conmovedora. Allí se pueden ver tres exposiciones permanentes:

El campo de concentración de Mauthausen: instalado en la antigua enfermería, recorre la historia del campo de 1939 a 1945 en torno a tres ejes: los inicios de la guerra y su evolución, la historia del campo desde su creación hasta su liberación y un conmovedor testimonio de la vida de los prisioneros a través de objetos de su vida cotidiana. La exposición concluye con testimonios de supervivientes y familiares de las víctimas, con numerosos documentos audiovisuales y una retrospectiva sobre la reconstrucción de Austria tras la guerra.

La sala de los nombres: en esta sala de los nombres, en bloques geométricos colocados como un laberinto, están inscritos los nombres de más de 81.000 víctimas identificadas.

Los escenarios del crimen de Mauthausen - Buscando rastros muestra grandes fotografías de los diferentes lugares del campo. Entre otras reliquias conmovedoras: una jeringa de médico o el ventilador de extracción de una cámara de gas.