PIAZZA SAN DOMENICO MAGGIORE

Es una de las plazas más bellas de Nápoles, viva de día y de noche. Bordeada por suntuosos palacios, está dominada por la curiosa cabecera almenada de la iglesia de San Domenico Maggiore. La plaza fue construida en el siglo XV por Alfonso I de Aragón; en 1658 se erigió el obelisco de San Domenico como exvoto tras la peste de 1656, que había diezmado a dos tercios de la población. Decorada por Cosimo Fanzago, fue completada en el siglo siguiente por Domenico Vaccaro (1737).