ENNISH FRIARY

Este priorato franciscano fue fundado en el siglo XIII por Turlough O’Brien, rey de Thomond. En torno a este lugar se desarrolló la ciudad de Ennis. El priorato prosperó gracias al apoyo de los O’Brien. Turlough O’Brien lo mandó construir con la esperanza de expiar sus pecados y entrar en el cielo. Incluso esperaba ser enterrado allí, pero murió antes de que se terminara el edificio y fue enterrado en otro lugar. El monasterio se disolvió en 1543, pero los monjes permanecieron en Ennis hasta 1570 bajo la protección de los O’Brien e incluso ocuparon algunas de las instalaciones del priorato hasta 1617. El primer impacto proviene de la altura de la nave, de la forma en que el muro que cierra la iglesia se lanza vertiginosamente al vacío. La tumba de Creagh es interesante por el altar del siglo XV que incorpora, que muestra sucesivamente la traición, la flagelación, la crucifixión, el entierro y la resurrección. Todos estos bajorrelieves tienen una composición remarcable, ya sea por la significativa desproporción de los actores, ya por la audacia estilística. La resurrección en particular, pero las escenas de la flagelación y la crucifixión son igualmente fascinantes. En el crucero sur, tampoco hay que perderse un pequeño cuadro en bajorrelieve: una representación del Ecce Homo de rara fuerza y belleza. El torso abierto, los ojos cerrados, las manos atadas que descansan sobre el propio marco de la escultura rodeada de los instrumentos de la pasión y la crucifixión. Una maravilla de pura emoción. Merece la pena verlo.