CASTILLO DE ROSENHOLM (ROSENHOLM SLOT)
Castillo construido entre 1559 y 1567 y propiedad de una de las grandes familias aristocráticas de Dinamarca, los Rosenkrantz.
Construido entre 1559 y 1567, este castillo de ladrillos rojos está rodeado por un foso y un parque, que incluye un bello jardín formal y un pabellón (la torre Holger). La entrada se encuentra en la parte trasera del castillo. Al adentrarse en el patio sorprende la asimetría de las dos alas enfrentadas. Desde su construcción, el castillo ha pertenecido a una de las grandes familias aristocráticas de Dinamarca, la familia Rosenkrantz, la misma que menciona Shakespeare en Hamlet. El actual barón Rosenkrantz representa a la 17.ª generación de la familia. El nombre forma parte de la historia política de Dinamarca desde el siglo XIV, y probablemente deriva del escudo de armas, que representa una corona de rosas o un rosario.
A pesar del aspecto de fortaleza que le confiere el foso, el castillo nunca tuvo función militar. A diferencia de otras fortalezas de la misma época, es más bien un castillo de recreo. Se inspira en modelos italianos y presenta una logia en la fachada principal. El interior fue muy modificado en el siglo XVIII. No obstante, en las salas abiertas a los visitantes se conservan numerosos tapices flamencos y franceses, muebles españoles y árabes y cuadros, entre ellos muchos retratos de miembros de la familia.
En 2017, el antiguo piso y estudio de Arild Rosenkrantz (1870-1964), pintor cercano a los simbolistas, se transformó en una galería de arte donde cada año se presenta una exposición con un tema diferente.