MUSEO RUDOLPH TEGNER (MUSEUM OG STATUEPARK)
Un museo ubicado en un edificio diseñado como un búnker, donde podrá descubrir las inmensas estatuas del artista Rudolph Tegners.
Un lugar que no se parece a ningún otro y que contrasta radicalmente con su entorno. El edificio en sí está diseñado como un auténtico búnker. Se construyó en 1938 como un cubo de hormigón alto y sin ventanas, con una cúpula de cristal que proporciona iluminación natural. Aquí se pueden ver todos los excesos del artista Rudolph Tegners (1873-1950), su gusto por las estatuas inmensas, de proporciones gigantescas. Por ejemplo, una mujer desnuda, recostada en una pose de estilo romano, con curvas muy redondeadas y el brazo colgando despreocupadamente, ¡casi tan largo como todo su cuerpo! También pone de manifiesto su talento para transmitir sentimientos: en los rostros de las parejas que se abrazan se puede leer placer y dicha, a veces ansiedad.
Es un estilo bastante cercano al de los grandes escultores de su generación, como Mariano Benlliure o Gustav Vigeland en Noruega. También tiene la enfática monumentalidad de los encargos nacionalistas o comunistas. De hecho, Tegners fue criticado por sus simpatías políticas. El museo se define como un mausoleo, ya que el artista está enterrado en el centro de la sala principal, bajo la losa, mientras que las cenizas de su mujer están contenidas en el plinto de un enorme Apolo.
En el exterior, un vasto parque, donde pastan algunas ovejas, alberga otras estatuas; ha sido reformado recientemente, así que no dude en dar un paseo. Por último, se pueden comprar vaciados de algunas de las obras... que afortunadamente no son tan monumentales.