PALACIO Y MUSEO BRUKENTHAL
Se tardaron diez años (1778-1788) en construir este palacio, considerado hoy uno de los mejores museos de Europa del Este. Además de sus ricas colecciones, merece la pena visitar el palacio. Esta obra maestra barroca, punto de referencia de la ciudad, fue diseñada por el barón Samuel von Brukenthal, gobernador de Transilvania de 1777 a 1787 y notorio favorito de la emperatriz María Teresa. Brukenthal, que también era un gran amante del arte, pidió en su testamento que el palacio y sus colecciones personales fueran accesibles al público tras su muerte. Inaugurado en 1817, el museo es conocido en toda Europa por la riqueza y diversidad de sus colecciones, entre las que destacan los 1.090 cuadros que pertenecieron al barón. Entre ellas, 450 obras de la escuela flamenca (Rubens, Van Dyck, etc.), 500 pinturas alemanas que ilustran la transición entre los estilos gótico y barroco, y cuadros de artistas italianos de diversas épocas. También hay obras de artistas rumanos, dibujos y grabados transilvanos de los siglos XVII al XIX y piezas excepcionales de orfebrería.
También se ha conservado la biblioteca del Barón, completada con la colección de las bibliotecas medievales de Sibiu. Contiene 280.000 volúmenes, entre ellos una colección de incunables (obras impresas antes de 1500) y el Breviario de Brukenthal, escrito en pergamino con magníficas miniaturas de pintores flamencos de los siglos XV y XVI. Ya no se puede visitar y está reservada a los estudiantes.