SEOLHAEDON
leer másEste moderno restaurante está especializado en el donkaseu (돈까스), primos del cordon bleu y hecho de cerdo empanado. Aquí, están chorreando queso. Puede pedirlos solos o con un maeun galbi jjim (매운갈비찜), un plato de fideos con fécula de carne y patatas acompañado de una salsa picante de soja caramelizada y sésamo. Puede elegir la cantidad así como el grado de especia (5 niveles). Una excelente dirección lejos de ser dietética pero tan codiciosa y sabrosa.
PUNGJEONSAMGYETANG
leer másAquí puede probar uno de los grandes clásicos de la gastronomía coreana, pero que también es una de las especialidades de la ciudad de Daejeon: el sabroso samgyetang. Es un caldo de ginseng en medio del cual se sienta orgullosamente un apetitoso pollo (entero, así que no lo comas antes). Este último contiene muchas sorpresas deliciosas, ya que está lleno de arroz, azufaifas, jengibre, ajo... Es un sabor indescriptible que sorprende a muchos paladares occidentales. Los coreanos lo disfrutan mucho en verano porque es un plato energético.
OC KALGUKSU
leer másPor supuesto, tienes que esperar en la fila antes de conseguir tu mesa, pero vale la pena. Los lugareños le dirán que comen algunos de los mejores kalguksu con almejas (sopa de fideos casera). A través de una ventana se puede incluso admirar al cocinero preparando y cortando sus fideos. Estamos de acuerdo con el boca a boca porque el plato es realmente delicioso (y perfecto para los días fríos de invierno)! Para los paladares más exigentes, añada un poco de pimiento picante para condimentar el plato. Además, el ambiente del establecimiento es agradablemente local.
YEONSANSIJANG DOTORIMUK
leer másAquí, una de las especialidades de la ciudad es deliciosamente declinada. Descubrirás y apreciarás el sabor de muk (gelatina hecha de bellotas). Se puede comer con arroz, en una sopa caliente con algas y cerdo o en un caldo frío con sabor a soja y sésamo. Un pequeño extra del establecimiento, la cocina en el medio del edificio está abierta a los ojos de los huéspedes. Así que puedes salivar mientras observas la preparación de los platos que te serán servidos (rápidamente). Una buena dirección, sorprendente y a bajo precio.