LAL QILA (ROJO FUERTE)

En 1638, el emperador Shah Jahan decidió trasladar su reino de Agra a Delhi. Dejando de lado el antiguo fuerte ocupado por su bisabuelo Humayum al este de la ciudad, hizo construir una nueva ciudad con su nombre: Shahjahanabad. El Fuerte Rojo o Lal Qila se convirtió en su elemento estratégico. Los saqueos cometidos en el siglo XVIII por el rey persa Nadir Shah, luego por el líder militar afgano Ahmed Shah y finalmente por el gobernante de Bharatpur Jawhar Singh dañaron gravemente el interior del edificio. Tras la revuelta de los cipayos en 1857, los británicos arrasaron las zonas colindantes para "limpiar" la vieja Delhi y asegurar una tierra de nadie alrededor del fuerte. Lo mejor es visitarlo por la mañana para aliviar las multitudes. Si se pasa por Agra, su fortaleza roja, bastante similar, está mejor conservada.

Se entra en el fuerte por la puerta de Lahore, coronada por una galería de pequeñas cúpulas blancas. Fue en lo alto de esta puerta donde se izó la primera bandera de la India independiente el 15 de agosto de 1947. A continuación, se cruza un callejón cubierto, el Chhatta Chowk, un antiguo mercado ahora acosado por tiendas de recuerdos. En el Nakkar Khana, o "patio de los tambores", los músicos solían reunirse para recibir a los invitados distinguidos. El callejón central del vasto parque conduce al Diwan-i-am (sala de audiencias públicas) donde el emperador reunía a sus súbditos. El lugar sigue insinuando el lujo de antaño, aunque lamentablemente los saqueadores lo hayan privado de sus más ricos ornamentos.

Camina alrededor del Diwan-i-am para llegar a las dependencias privadas del fuerte. Esta serie de pequeños palacios sólo da una modesta idea del esplendor de la corte mogol en el siglo XVII. El Rang Mahal (Palacio de los Colores) fue la residencia de la primera esposa del emperador. Un canal alimentado con agua perfumada aportaba un poco de frescura al edificio. El emperador, por su parte, se alojó en el Khas Mahal (Palacio Privado), decorado con espectaculares biombos calados. Recibió a sus distinguidos invitados en el Diwan-i-khas (sala de audiencias privada). El Diwan-i-khas albergaba la maravilla del Fuerte Rojo: el Trono del Pavo Real, engastado con 26.733 piedras preciosas. En 1738, el rey persa Nadir Shah se apoderó de ella y el trono desapareció. A la derecha de este complejo palaciego se encuentra el Mumtaz Mahal, residencia de las princesas favoritas. Alberga un museo arqueológico con colecciones de miniaturas mogoles, manuscritos, armas y ropas reales. La pequeña Moti Masjid (o Mezquita de la Perla), a la izquierda de los palacios, sirvió como lugar de oración para el emperador Aurangzeb.