REFUGIO JARJEER PARA MULOS Y BURROS

Dar una segunda vida a burros y mulas en Marruecos es la misión que Susan y Charles, antiguos abogados británicos que vinieron a instalarse cerca del pueblo de Oumnas, asumieron hace varios años. Los burros y las mulas forman parte de la identidad turística de Marrakech en particular, acentuando la visión pintoresca que los visitantes tienen de la ciudad roja. En el campo, estos animales son una fuerza de trabajo indispensable para el hombre y son esenciales para la subsistencia de la población. En muchos casos, los tratamientos severos causan un gran sufrimiento (deformación, parálisis, pérdida de dientes, ceguera, etc.) y acortan la esperanza de vida de los caballos. En el refugio, casi un centenar de ocupantes, burros y mulas, recuperan una mejor salud, un descanso más que merecido y un santuario benévolo donde retirarse con dignidad. Se les permite vivir allí a su ritmo, sin la limitación del trabajo perpetuo. Su dieta se estudia con precisión y se confía a los buenos cuidados de un equipo de cinco mozos del pueblo. "Es muy importante para nosotros trabajar con la población local y que se entienda esta causa", dice la pareja que explicará con pasión, gran amabilidad y mucho detalle (en inglés, por supuesto) esta hermosa aventura que sólo puede continuar gracias a la generosidad de los visitantes. Se recomienda una visita, especialmente para aquellos que se sientan concernidos por la causa animal.