SILK ROAD HOTEL
Televisión las 24 horas, habitaciones inmaculadas con balcón… Un toque de lujo bien merecido. Un hotel situado frente a los famosos Budas y que ofrece unas vistas magníficas al complejo. El único inconveniente es que está cerrado durante el invierno debido a la nieve. Si estás cansado de dormir en el frío, si estás cansado de los cortes de electricidad o de la falta de agua, el hotel Silk Road es el lugar ideal para los que pueden permitírselo. Y si el precio te parece demasiado alto, al menos ofrece una cena en el restaurante japonés. La propietaria es una japonesa viviendo en Bamiyan desde hace algunos años y casada con un afgano. En la planta baja, una pequeña tienda de artesanía vende ropa, bolsas y osos de peluche recuerdos.
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