Obras de arte para ver Hanoi

En palabras de P. Doumer: "El trabajo más notable que se ha hecho en el Lejano Oriente." Para otros, es el "dragón que se extiende a ambos lados del Río Rojo".

El puente cambió de nombre después de la revolución de agosto de 1945. Veinte pilares de 40 metros de altura que sostienen el puente de 1.682 metros de largo están sostenidos por cajones enterrados hasta 30 metros por debajo del nivel del agua baja. Algunos de ellos no son originales y fueron añadidos debido a los daños en el puente. El puente fue diseñado por la compañía Gustave Eiffel, y la obra fue realizada por Daydé et Pillé, una compañía con sede en Creil, con un costo de 10,5 millones de francos en ese momento. El trabajo duró un poco más de tres años. La obra fue inaugurada en 1902 (unos quince años después de la Torre Eiffel) por el emperador Thanh Thai (dinastía Nguyen) y Paul Doumer, entonces Gobernador General. El puente debía dar testimonio de "el poder de la civilización francesa en las obras de paz".

Para los vietnamitas, es hoy un símbolo de unidad, resistencia y patriotismo. Fue bombardeado 14 veces por la fuerza aérea americana y cada vez fue reparado. Esto también explica por qué sólo quedan seis de los 19 arcos originales. Al principio, el puente sólo estaba destinado a ser utilizado para el ferrocarril. La calzada, añadida en 1923, ya no se usa hoy en día.

La isla de Phu Xua (conocida como la isla del plátano) separa el caprichoso curso del río en dos ramas principales. Se formó por la acumulación de depósitos aluviales arrastrados por el río, y la tierra es muy rica y naturalmente apta para la agricultura. Los habitantes de la capital mantienen huertos y plantaciones de árboles frutales. En todo momento, el Sông Hông (Río Rojo) ha planteado problemas a los ingenieros, problemas debidos a las toneladas de aluvión transportadas por el río (el delta del río se extiende en promedio 10 km por siglo). A pesar de un mantenimiento bastante exigente, la navegación sigue siendo difícil porque, durante una inundación del monzón, los bancos de arena son extremadamente cambiantes.

El venerable puente ha sufrido los estragos del tiempo y la historia (los efectos de la edad y el óxido se suman a los de los bombardeos...) y los trabajos de renovación se hacen urgentes. Se están considerando varios escenarios: restauración, reconstrucción parcial o completa, reubicación. La cuestión no está decidida, pero desata pasiones por la carga histórica y simbólica ligada a la obra.