En el Lakana Hotel, en Sainte Marie, se expuso a algunos de sus cuadros. La alegría y la magia serían las primeras impresiones que podría describirse al ver sus obras. Con rasgos muy precisos y colores cálidos, Fabrice sabe transmitir unas bonitas emociones a través de su pintura. Pintor Saint-Marien y autodidacta crea con alegría sus cuadros que se combinan perfectamente con el espíritu del hotel: cálido y acogedor, como parecen ser las personas pintadas. No es más que un relato de su trabajo que se indica en el hotel, pero que da ganas de ver más. La puesta de sol recuerda lo que puedes observar desde el Lakana Hotel, siempre en una calma excepcional. ¡Enhorabuena al artista!

 

/v42636-sainte-marie/c1166-hebergement/c158-hotel/369247-hotel-lakana.html