LA GRANJA

La Granja, antigua casa solariega del siglo XVIII, fue hogar de monjes de la orden del Císter durante dos siglos y luego pasó a manos de familias nobles de Mallorca: Vida, Fortuny y luego Seguí (los actuales propietarios). La visita, que adopta la forma de un recorrido de 64 pasos por los 2.000 metros cuadrados de un museo etnológico, permite descubrir todos los oficios relacionados con las actividades de una granja: una casa de tintes, una pequeña cocina de mermelada, un molino de aceite... ¡y una colección de instrumentos de tortura! La casa es enorme y respira historia: cada habitación es un placer para los ojos y un verdadero viaje en el tiempo. En el jardín, las fuentes y las cascadas son testigos del pasado de este lugar único lleno de manantiales naturales en el que se encontraban 11 molinos de agua, dos de los cuales siguen funcionando en la actualidad. También hay una gran variedad de flores y árboles, así como muchas aves y animales de granja. A la salida, no deje de probar el vino dulce de la zona, las mermeladas caseras (de calabaza, naranja, higo y albaricoque), los deliciosos buñuelos , la sobressada o las tortas de embutido, y el famoso pan de higo y almendra aderezado con anís y otras hierbas locales. Es posible hacer algunas compras en la tienda situada en la cafetería. También es posible descansar en las hamacas, una actividad ideal cuando hace calor. Una visita obligada para las familias