ESCUELA EN CASA
Un vasto hipódromo que ocupa toda la parte central del monte Palatino.
Resulta difícil imaginar que, mientras paseas por la espléndida plaza Navona, bajo tus pies yacen los restos de un inmenso estadio, ¡a unos 450 m bajo el pavimento! El estadio de Domiciano fue construido en los años 85 y 86 para celebrar el Certamen Capitolino, una competición deportiva. El estadio, construido con bloques de travertino y ladrillos, medía aproximadamente 275 x 106 m. Su perímetro estaba decorado con un pórtico de dos niveles y, en el nivel inferior, debía de haber pilares de mármol (aún pueden verse sus bases). Las gradas tenían capacidad para 30.000 espectadores. En 1936, unas excavaciones sacaron a la luz parte de la cavea. En la actualidad, existen dos recorridos diferentes para descubrir las dos zonas de este lugar declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO: el hemiciclo central y el hemiciclo oriental. La audioguía, disponible en francés, está incluida en la entrada y proporciona más información sobre el estadio (también existe una versión para niños). Los distintos paneles explicativos recorren la historia del deporte en la antigua Roma y cuentan diversas anécdotas sobre los emperadores romanos. La visita normal de 16 paradas sólo incluye la visita al hemiciclo central. La visita exclusiva de 21 paradas, con un número limitado de plazas, incluye también una visita a la parte oriental, en el sótano de la École française de Rome, en la Piazza Navona. Los fines de semana se ofrecen visitas con auriculares de realidad virtual (4 €/persona, además del precio de la entrada).