SARDUNYA BAY

Este pequeño restaurante sin pretensiones (carnes a la parrilla, patatas fritas, ensaladas, etc.) es un buen lugar para terminar el paseo por el sendero costero de Lapithos, con una terraza justo encima de la bonita playita de la bahía de Sardunya. No hay demasiada gente. El establecimiento también ofrece alquiler barato de tumbonas y sombrillas y mucha animación en verano (conciertos los fines de semana, clases de salsa los lunes por la noche, etc.). Lamentamos, sin embargo, que la playa no siempre esté bien cuidada.