Qué ver y hacer Kuching

Inaugurado en 2022, este vasto museo alberga una impresionante colección de arte y artesanía de las distintas comunidades de Borneo. En una escenografía muy lograda y un entorno arquitectónico extravagante, trajes tradicionales, armas, cerámicas e instrumentos musicales dan testimonio de las ricas tradiciones de la región. El museo también presenta exposiciones interactivas sobre prácticas agrícolas, artesanía, danza y ceremonias locales. Un punto de partida imprescindible para descubrir la cultura local.

Fundado en 1891 por el rajá Charles Brooke y reconocido como una de las mejores exposiciones del sudeste asiático, este museo cuenta con una excepcional colección etnográfica. Invitado por el rajá, el antropólogo Alfred Wallace, contemporáneo de Charles Darwin, trabajó durante dos años para abrir el museo. Cuando Sarawak se independizó en 1963, el naturalista y arqueólogo Tom Harrison, destinado entonces en el museo, contribuyó a su renombre al descubrir un cráneo de 39.000 años de antigüedad en la cueva de Niah, en el centro de la región.

En la primera planta, fotografías de finales del ^{siglo XIX} y principios ^del XX muestran a las distintas tribus dayak con sus trajes tradicionales. También están representadas todas las artes y oficios primitivos de las longhouses: cráneos trofeo de la época de los cazadores de cabezas, máscaras utilizadas en las fiestas de la cosecha, los ritos de fertilidad, las danzas espirituales y las ceremonias de la muerte. Las de aspecto siniestro, ojos repugnantes y orejas sobredimensionadas se reservan para las danzas macabras.

Los kramen, una especie de tótem de madera preciosa que los orang ulu tallaban y erigían a la entrada de sus casas para protegerlas de los malos espíritus, ocupan una galería. Algunas de estas tradiciones perviven aún hoy, como la cestería y ciertas creencias animistas. Por eso, antes de alojarse en una longhouse con una tribu, es imprescindible visitar el Museo de Sarawak para conocer mejor estas preciosas culturas.

A los pies del monte Santubong, esta aldea cultural ofrece a los visitantes reproducciones fieles de los hogares y estilos de vida de siete grupos étnicos y comunidades que viven en Sarawak. Se invita a los visitantes a descubrir el modo de vida de los bidayuh, iban, orang ulu, melanaus, penan, chinos y malayos. Dentro de cada casa, un representante de la comunidad guía al visitante por la arquitectura, el hábitat, las tradiciones y la artesanía: practican su arte, tocan música, disparan cerbatanas o tejen, cocinan y preparan sagú. Aunque una representación siempre es artificial, ésta merece la pena por la disposición de los actores a compartir sus costumbres con usted de una forma viva. Único en su género en Malasia, el proyecto está dirigido por las comunidades y sus representantes, no por una empresa privada deseosa de obtener beneficios. Además, la diversidad de las tribus y comunidades también nos habla de la historia del poblamiento de Sarawak. En una visita de medio día, se puede obtener una amplia visión de la diversidad de Sarawak, algo casi imposible en un solo viaje a Borneo. La visita termina con un espectáculo de danza folclórica de 45 minutos que se celebra a última hora de la mañana y por la tarde. No hay que dudar en hacer una parada en el restaurante, donde se pueden degustar especialidades locales a precios razonables.

El fantástico Rainforest World Music Festival (www.rwmf.net) se celebra aquí todos los años a finales de junio y principios de julio.

Esta empresa, situada^en el pontón 12 del paseo marítimo, ofrece excursiones de media hora o una hora. Las pequeñas embarcaciones bajas de madera son más íntimas y relajantes que los cruceros habituales. Son la manera perfecta de admirar la ciudad desde el agua, sin agotarse, pero ¡cuidado con los mosquitos al atardecer! No dude en hablar directamente con el personal si tiene alguna petición especial, como una visita privada o fuera de los horarios anunciados.

Este edificio rosa, construido en 1912, sirvió de tribunal de justicia para la comunidad china hasta 1921, cuando se convirtió en la Cámara de Comercio China de Kuching. En la actualidad, el Museo de Historia China recorre la vida de las distintas comunidades chinas de Sarawak desde principios del siglo ^XIX hasta la época de los rajás blancos. Se exponen instrumentos musicales, hermosas cerámicas que datan de la dinastía Ming, artesanía de jade y diversas obras de arte. Si disfruta de la visita, no dude en hacer un donativo al salir del museo.

Terminada en 1879, al mismo tiempo que el Fuerte Margarita, la Tour Carrée fue originalmente una prisión. Aquí se ejecutaba a los condenados a muerte. La torre se transformó en fuerte y, sin enemigos vengativos, se convirtió en salón de baile para los oficiales del ejército de Sarawak. Hoy, el edificio que da al río Sarawak y al Parlamento regional es un restaurante, Le Magenta. Al lado, descubrirá dónde desembarcaban los rajás cuando cruzaban el río camino del palacio al tribunal de justicia.

Este soberbio conjunto de edificios de estilo colonial fue iniciado por Charles Brooke en 1868. Quería ofrecer mejores condiciones a los miembros de su administración central. El edificio estuvo en uso durante más de un siglo, de 1871 a 1973. La torre del reloj se añadió en 1883 y el monumento conmemorativo a Charles Brooke, que se alza frente a la entrada del edificio, en 1924. Este monumento fue solicitado por el hijo del segundo Rajá blanco, que gobernó Sarawak de 1868 a 1917. El complejo es ahora un centro turístico.

Encaramado en lo alto de una pequeña colina, justo enfrente del Waterfront y del Museo de Historia China, este impresionante templo es el más antiguo de Kuching. Data de 1770, pero su historia sólo está realmente documentada a partir de 1843 y la ascensión de los rajás blancos. Fue uno de los pocos edificios que sobrevivieron al gran incendio de 1884 y al bombardeo japonés durante la Segunda Guerra Mundial. Se dice que tiene la mejor ubicación de toda la ciudad según los principios del feng shui, y que esto es lo que lo ha mantenido intacto.

"La calle de la India y sus alrededores fueron durante mucho tiempo el lugar preferido de los comerciantes indios. Ahora, totalmente peatonal y cubierta, hará las delicias de los amantes de los tejidos exóticos. Por la calle de la Mezquita de la India, un pequeño pasaje oscuro y estrecho, verá la primera mezquita de Kuching, construida por musulmanes del sur de la India en 1837. Al otro lado, se llega a la calle Gambier, que da al río. Llena de vida, aquí encontrará una amplia selección de especias que le sumergirán en el fragante mundo de la cocina india.

Bienvenido al MV Equatorial, un bonito barco construido en 1990 que ofrece cruceros turísticos por el río. A bordo, disfrutará de los comentarios de un guía que le presentará los lugares de interés de la ciudad, un espectáculo de danza y/o música local, refrescos y un gran confort. El recorrido incluye el Astana, el Antiguo Palacio de Justicia y la Gran Mezquita, así como lugares menos conocidos, como la magnífica casa del antiguo Ministro de Defensa, y ofrece unas vistas panorámicas únicas. Una excelente manera de descubrir Kuching.

Situado a 23 km al suroeste de Kuching, Siniawan, con sus viejos edificios de madera, es un pueblo que ha conservado su encanto del viejo mundo. No deje de visitar el antiguo templo Shui Yue Gong, dedicado a Guanyin. Los fines de semana por la noche, Siniawak cobra vida con el mercado nocturno de la calle principal. Bajo los farolillos rojos chinos, lugareños y visitantes se sientan a disfrutar de la gran variedad de especialidades que se ofrecen. Una forma estupenda de pasar una velada es deleitarse con las especialidades locales y sumergirse en el cálido ambiente.