La Morada del Caos

En un mundo tan establecido, todavía hay espacios para la libertad. En un mundo demasiado estático, el Demeure du Chaos (Morada del Caos), un museo de arte contemporáneo, es un espacio en movimiento, que evoluciona al ritmo de las creaciones que lo componen en un conjunto que incluye no menos de 5400 obras de arte inéditas. En 1999, en el pequeño pueblo de Saint-Romain-au-Mont-d’Or, que había estado dormido hasta entonces (y cuyos habitantes todavía no aceptaban la transformación de la Demeure), Thierry Ehrmann, un artista visual visionario, abrió el museo L’Organe (Órgano), que en 2006 pasó a llamarse Demeure du  Chaos. Es totalmente gratuito y está abierto a todos los públicos. Se trata de un lugar totalmente único, singular en el mundo, que desafía desde el principio por su enfoque con muchas inscripciones irónicas, proféticas, esotéricas y alquímicas grabadas en las paredes. Es un universo fantástico e hiperrealista que se extiende tanto fuera como dentro de la casa, donde se exponen más de cinco mil obras de todo tipo: escultura, pintura, grabado, instalación... El «órgano» es una materia viva y el museo está en constante evolución. Si la primera visita es toda una revelación, las siguientes también lo serán al descubrir las nuevas obras que aparecen con regularidad. Algunas de estas se han convertido en clásicos totalmente impactantes, como los Porteurs de cendres (Portadores de cenizas), los famosos Vanitas, el Bunker, los 99 sentinelles alchimiques (99 centinelas alquímicos) o Ground zero, una monumental escultura de acero bruto y hormigón que evoca el mundo del 11 de septiembre de 2001, otro punto de partida para las obras de la Demeure du Chaos. El recorrido por este museo de 9 000 m2 lo puede hacer a su ritmo, incluso en una visita virtual a la página web o en su Facebook Musée d’Art Contemporain-La Demeure du Chaos. Los contrastes en la morada son sobrecogedores (belleza/fealdad, violencia/paz, orden/desorden), lo que nos obliga a reaccionar ante nuestro mundo, nuestra indiferencia y nosotros mismos. Un museo auténtico que desempeña su papel en este nuevo siglo.