GOUTER
Es como si volviéramos a ser niños a la hora del probador. Recuerdan todas las cosas buenas que se esperaban y que no siempre se tenía… Hoy es Sébastien Bouillet quien ha decidido estropearnos con su nueva tienda, justo al lado de la casa madre, titulado Sabter. Decoración a la antigua con efecto madeleina de Proust (de hecho las madeleinas caseras son deliciosas) garantizado y pasteles de antaño en forma de tiro de corazón en cada bocado. Para todos los golosos, la bollería a base de materias primas de alta calidad (harina de montaña, mantequilla DOP…) y tantas otras maravillas no basta. Por lo tanto, todos los días se vuelve a la plaza para saborear un pastel, sabores bretones, galletas caseras, entre ellas un famoso Trabouille especialidad a la pralinina. Sin duda, Sébastien Bouillet es un provocador. Un provocador de emociones recomendado por el obispo.