Restaurante que ofrece buenas recetas heredadas de los antepasados.
Cada corcho tiene su propia personalidad. A ma Vigne, con su llamativa fachada roja, lleva desde 1960 en la misma liga que los mejores tapones, pero con un carácter que la distingue. Su ubicación en la orilla izquierda del Ródano, a dos pasos del puente de la Guillotière. Por su carta de especialidades lyonesas, cuyas recetas se remontan a Joséphine, que transmitió su manera de cocinar los callos, cocidos durante 8 horas, o la andouillette gratinada. Pero sobre todo hay otra especialidad de la casa: ¡el steak-frites! Un trozo de ternera cocido en mantequilla de Etrez y servido con patatas fritas: ¡una delicia absoluta! Fabulosa tarta de naranja casera. Selección regional de vinos en tarros. Único en su género.
Un peu à l'étroit mais ça fait parti du charme