LA FRISE
Una dirección para no comer solo a mediodía, para no comer tonto, ya que "en Frisia, nos hacemos del arte…". Sólo para la pequeña historia, la Frisa fue una de las cervecerías más importantes de Grenoble y se encontraba en la calle de Frisia (actual barrio Europole, a dos pasos de aquí). Esta cafetería-restaurante es un lugar que cada uno contribuye a hacer vivir, distendido, atado, hasta tal punto que es muy aconsejable reservar para tener su mesa a la hora del almuerzo. Una verdadera cita de barrio, una referencia de acostumbrados donde los recién llegados son bienvenidos, para alimentar esta atmósfera rica en encuentros. La cocina sencilla y nutritiva está en el tono, el de un bienestar un poco ruidoso. Colocadas en mesas de madera maciza, los platos, ensaladas, pasteles, antesiletes y un delicioso conejo propuesto al plato del día se sirven copiosamente en una sala donde se encuentra el chatón. No dudes en entrar en este lugar a primera vista y sorprenderse de las obras de los artistas que se encuentran allí. Arte y sencillez para una dirección que desfrena todas las mitades.
Une des personne qui travaille la bas et qui était au comptoir à très mal parlé à des clients et leur a fait comprendre qu'il fallait qu'il se dépêche de finir...j'ai été choquée de son comportement. Vraiment je ne recommande pas cet endroit, il y a plein de resto autours bien meilleur et où le personnel est accueillant.
La carte est bien conçue: à côté de 6 ou 7 classiques de brasserie proposés tous les jours (dont un excellent tartare de boeuf, ou de saumon, et "l'escalope Frise" à goûter absolument), sont proposés 2 ou 3 plats du jour toujours très bons avec des légumes variés.
Les desserts sont excellents: quotidiennement, tarte au citron meringuée (une tuerie!!!), tarte tatin avec boule de glace à la vanille (idem!!!!) et crumble avec sauce chocolat (idem!!!), complétés souvent aussi d'un ou deux desserts du jour (crème brûiée, tiramisu, panacotta, poire pochée...).