LE CHRISTIANA * *
Hotel-restaurante de ambiente acogedor que ofrece platos locales y especialidades regionales.
Este bonito chalé, rodeado de vegetación o nieve de nieve según la temporada, es el claro rebosante de los amantes de la sencillez para venir a descansar en la montaña. Desde la entrada, el buen olor de madera hasta las 14 habitaciones rehechas en un estilo montañés acogedor, perfectamente conservado, contribuye a la tranquilidad del lugar. En invierno, se disfruta plenamente de la temporada al pie de las pistas o de la terraza bañada por el sol. Para borrar las cortesías del día, hay un espacio con sauna o bañera de hidromasaje. También hay un poco de tranquilidad en la temporada estival cuando se disfruta de la piscina climatizada y se puede tomar el sol mientras los niños se divierten en los juegos exteriores. También hay un ambiente distendido en el restaurante el Stem, donde los preparados a los acentos de la región y las especialidades regionales esperan a los golosos. Se comen las costras saboyardas servidas con tabla de madera o el pequeño fundador de Arly servido con patatas, charcutería y ensalada verde. Un hotel restaurante en el que no se olvidan las tradiciones familiares, una forma de disfrutar de un excelente paréntesis de relax y de una acogida como nos gustaría encontrar en la hostelería.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Los puntos fuertes de este establecimiento:
Opiniones de los miembros sobre LE CHRISTIANA
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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L'accueil est chaleureux, la demi pension très bonne, les chambres impeccables - les plus belles sont celles qui donnent sur les montagnes, avec balcon. Un vrai plaisir dès que le soleil est de la partie.
L'emplacement est bien : le centre du village n'est pas loin et l'hiver il y a une navette gratuite pour aller jusqu'aux pistes. Pour ceux qui préfèrent la randonnée, il y a de quoi faire sans prendre la voiture.
Nous avons profité de l'espace détente - un vrai bonus après une journée de ski.
Le domaine au passage est grand et souvent enneigé.