CHALET-HOTEL D’AILEFROIDE * *
Es bonito como la antigua, es bonito como la tradición, es bonito como un establecimiento bien renovado donde se mantiene el encanto de antaño en un decorado que Agatha Christie no habría desistido para plantar una magnífica novela. Aquí todo es acogedor, cuidado con cuidado y la recepción que se recibe es tan esperada como natural. El confort está en la cita y puedes relajarte en la sauna o en el baño de burbujas mientras los niños se divierten en el parque con los juegos. Si vienes a probar los encantos de senderismo o a las delicias del descanso y de la contemplación, puedes hacer que nuestra estancia sea agradable. Hay dos restaurantes, el Refuge y el Gran Beal, donde se sirven especialidades de montaña y cocina gourmet, y un snack bar-glaciar que nos permite degustar platos tradicionales que han optado por la comida orgánica. Una parada de buen gusto.