VILLA Y JARDÍN EPHRUSSI DE ROTHSCHILD
Una hermosa residencia en la Riviera Francesa, con patio, terraza y jardines temáticos con un magnífico salón de té
Testigo de la grandeza de la Belle Époque, es una de las más bellas residencias de la Costa Azul. Inspirada en los grandes edificios renacentistas de Venecia y Florencia, la casa está siendo renovada para devolverle su tono ocre original. Tiene una docena de salones con muebles y elementos decorativos de gran refinamiento, así como una extraordinaria colección de porcelana y obras de arte. El patio -con sus columnas de mármol- y el gran salón -con su gran apertura al mar- son realmente magníficos. Un paseo por los jardines temáticos le llevará de un continente, un siglo y una civilización a otra: francés, japonés, español, florentino, provenzal, exótico, lapidario, una preciosa rosaleda (que podrá ver en mayo y junio) y el jardín de Sèvres. Desde los promontorios, se puede contemplar la espectacular bahía de Villefranche con sólo el sonido de las fuentes. De vez en cuando se organizan veladas musicales y visitas nocturnas. El brunch se ofrece en el magnífico salón de té instalado en el antiguo comedor de Béatrice Ephrussi de Rothschild, que quiso que su villa siguiera siendo un lugar de acogida y de intercambio cuando la legó al municipio. En la cocina, la chef prepara con delicadeza platos sencillos y tan elegantes como el lugar donde oficia. Cuando hace buen tiempo, puedes sentarte bajo los naranjos de la terraza. Un verdadero encanto.