CHATEAU DE PIERREFONDS
Un castillo sublime que inspiró a Walt Disney para hacer , y que no debe dudar en visitar (de forma gratuita).
Cuando vea el castillo tras atravesar el bosque de Compiègne, probablemente dirá que sale directamente de un cuento de hadas o de un decorado de película. Pues tendría razón, porque Walt Disney lo utilizó como base para La Bella Durmiente. Se trata de un antiguo castillo cuya creación fue ordenada por Luis de Orleans en 1393. Resistió dos intentos de asalto del ejército real, pero el asedio de Richelieu por orden de Luis XIII (1617) fue fatal. Napoleón I compró Pierrefonds en 1811, pero fue Napoleón III quien le dio una segunda vida. Encargó su restauración al arquitecto Viollet-le-Duc, conocido por sus grandes proyectos como Notre-Dame de París. Es esta curiosa mezcla de fortaleza y elegante arquitectura del siglo XIX lo que confiere al castillo su romántica singularidad. En el interior, hay elegantes habitaciones entre enormes estructuras. El personal del castillo también ha añadido toques modernos, con una aplicación de visita "la fantástica menagerie" (para descubrir el castillo en familia en compañía de animales fantásticos) y una mesa táctil para acercarse de forma lúdica. Si no tiene tiempo de visitar el interior, haga un recorrido por el castillo a través del parque (acceso gratuito). Por el camino verá tirachinas que se han conservado en su estado original. Una vez arriba, ¡la vista del castillo, el pueblo, el estanque y el bosque merece la pena! Un monumento histórico que no debe perderse.
Reserve las mejores actividades con Get Your Guide
Opiniones de los miembros sobre CHATEAU DE PIERREFONDS
L'original, propriété du duc d'Orléans, était-il réellement comme celà..?
Dans tous les cas l'architecte c'est fait très plaisir....De nombreux détails et des couleurs comme il y en avait au Moyen Age...!!
A voir absolument
L'architecture de qualité et l'état général méritent la visite.
Je recommande la visite payante du château. A minima, l'accès extérieur gratuit permet de visualiser la splendeur du bâtiment.
En plus la petite ville est vraiment jolie pour s'y promener. Passez l'après midi ou la journée c'est très sympa dans un cadre verdoyant avec un petit lac, des glaciers, des petits bistrots.
Et ce magnifique château comme un ancien chateau fort très bien restauré