Una guincura al entorno exótico: comes a lo largo de Oise, mirando el ballet de las barcas y escuchando el grito de las gaviotas. Este restaurante está situado en el pequeño puerto deportivo de Jaux, junto a la pasarela peatonal. Para completar el cuadro, las paredes están adornadas con maquetas de barcos, boyas de salvamento o anclas marinas… Pero lo más agradable es poder disfrutar de la gran terraza donde hay espacio (puede acoger hasta 150 personas). El bar-restaurante propone opciones bufé aptas para entradas y postres, pero también un plato del día, parrilladas o ensaladas… Es un lugar en el que no se pasa por casualidad, pero que merece la pena cuando se quiere salir del ambiente estresante de la zona comercial al otro lado del municipio de Jaux.
Que dire ....du début jusqu'à la fin tout était plus que parfait !
Un acceuil au top
Un placement au top
Un service au top Christophe
Un repas au top
Dans une ambiance cocooning merciiii maximilian
Et ce gâteau une tuerie !!
Mille merci une soirée inoubliable
Geraldine leblond