CLOÉ
¿Pero cuál es el secreto de la longevidad de Cloé? La respuesta es simple: una clientela fiel. Hay que decir que es encantadora, esta pequeña tienda de ropa de la calle Bressigny, abierta a principios de los años 2000. Un lugar íntimo, cálido, donde dos vendedores (entre ellos la gerente) reciben a los clientes como se reciben buenas amigas. Y son muchas, esas habituales, que vienen a encontrar aquí unos bonitos pantalones, vestidos, faldas o pequeños abrigos. Aquí se hace en la bohemia chic, como la marca de diseño estrella de la tienda, Rhum Raisin, pero también otras pequeñas marcas parisinas como Wendy Trendy, Sabini, o Colette. Los colores más variados suelen ser de puesta, al igual que las superposiciones y las materias fluidas. Por último, no hace falta tener necesariamente un tamaño de avispa para encontrar su felicidad: Cloé viste las angevinas del 36 al 50 (y por precios siempre tan honrados!).