EL MENHIR DE LA PIEDRA LARGA
El Menhir de la Pierre Long se clasificó en 1887. Está situado en la costa salvaje y se puede descubrir bordeando el sendero pedestre que da la vuelta a la península de Cresic en unos siete kilómetros. Los primeros signos de la presencia humana en el Crusic datan del neolítico con el menhir de la Piedra Larga. Desde la ubicación del menhir, hay vistas al municipio de Batz-sur-Mer. Este menuto de granulita se encontró en el suelo en 1766. El duque de Aiguillon lo hizo para que sirviera de referencia para los navegadores. Fue derribado por el ocupante durante la Segunda Guerra Mundial y fue levantado en 1976 y más cerca del acantilado. Una de sus caras tiene grabados -dos corazones enmarcados en una cruz-datables del siglo XVII o del siglo XVIII, tal vez en la recuperación del mendigo en 1744, pero posiblemente anterior. Están muy erosionadas por la exposición a los besos desde el desplazamiento del menhir. Las leyendas de la península de Crusic contemplan (desde el siglo XVI de manera continua en archivos de orígenes muy diferentes, civiles como eclesiásticos) que esta piedra era un lugar de reunión y del culto pagano de las "fiestas de Hirmen".