FORGE ADOUR
La plancha ha encontrado finalmente sus cartas de nobleza gracias a la multitud de sus funciones. A gas o eléctrico, la plancha, además de la cocina tradicional, se apodera de los alimentos, carbones, asados, asados, recalentamiento de carnes, pescados, verduras y frutas. Manu Merin, fundador de Forge Adour desde 1978, y su hijo, que ha mantenido viva la saga familiar, han desarrollado así su marca, referente en el mundo de la plancha y han declinado una gama muy amplia rodeándose de los mejores consejos de los artesanos y chefs profesionales. Con el paso del tiempo, la plancha se ha convertido en una verdadera isla de cocina, en terrazas y jardines, y es ahora el símbolo de la convivencia gracias a su uso, que ya no es sólo en verano, sino durante todo el año. La marca de know-how que se encuentra en Francia y en Europa.