LA COUR DU BEFFROI
En la prolongación de la calle Méaulens, y antes de llegar al cruce de Checoslovaquia, esta gran casa totalmente restaurada alberga una preciosa boutique. En el interior, es como en casa. Los muebles y objetos se presentan en dos plantas según el temática de cada habitación: comedor, salón, cocina, cuarto de baño, e incluso una terraza exterior con mobiliario específico. Todo está distribuido con mucho cuidado y gusto para resaltar las marcas emblemáticas de la tienda: Mathilde M., Orval, Anjel o Athezza. De la vela en el sofá, de los platos en la biblioteca de gran tamaño, de la ropa de casa con espejos o de las lámparas, una auténtica cueva de Ali Baba, donde no hay nada de lo que adornar su interior, así como pequeños o grandes regalos. ¡Se puede incluso presentar su lista de bodas! Y el trato es realmente encantador.