YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO Y MUSEO DE ENSÉRUNE
Un yacimiento arqueológico con un hermoso museo arqueológico, en el que se exponen todos los trabajos de excavación realizados en la necrópolis.
Ubicado sobre un montículo rocoso, en la confluencia de antiguas rutas terrestres y marítimas, a unos diez kilómetros de Béziers, Ensérune constituía probablemente uno de los oppidum más importantes del Mediterráneo meridional. Ya en el siglo X a. C., la población se concentraba en núcleos fortificados en alto, y Ensérune nació en el siglo VI a. C. En el siglo V a. C., con el apogeo de los intercambios comerciales, se construyeron fuertes murallas y se instaló la necrópolis al oeste de la colina. A finales del siglo III a. C., el oppidum conoció su mayor expansión: ocupaba la totalidad de la meseta. Las viviendas se organizaban alrededor de un patio y se inspiraban en el estilo greco-romano. En el siglo I a. C., sus pobladores abandonaron el oppidum para bajar a las llanuras.
En este yacimiento se pueden ver las delimitaciones de las viviendas, grandes vasijas enterradas que servían de despensa y huellas de la antigua necrópolis. Desde lo alto de la colina se obtienen unas vistas magníficas sobre los cultivos de girasoles de la laguna seca de Montady.
El museo, ciertamente uno de los más bellos museos arqueológicos de la región, contiene todos los hallazgos localizados en el yacimiento. En dos pisos, exhibe todo el trabajo de las excavaciones realizadas en la necrópolis. La parte más interesante es el recorrido audioguiado, que permite observar la evolución de la ciudad por periodos.