LA TOMATE

Muy a menudo los clientes me dicen: "Vine aquí por primera vez hace más de 30 años, y no ha cambiado" Y con razón, el Tomate, por el que han pasado varias generaciones, existe desde hace más de 45 años... Se ha ganado así el título de institución preservando al mismo tiempo la autenticidad del lugar. En el corazón del barrio de Saint Roch, el Tomate, situado en la calle Four des Flammes, siempre se reconoce por su gran letrero luminoso que representa un tomate con luces de neón rojas y verdes. Y cuando uno se encuentra frente a él, tampoco puede equivocarse... El escaparate que nos invita a entrar ¡también representa un Tomate!

Pero detrás de esta fachada, el restaurante esconde muchas sorpresas. Más allá de la sala por la que se entra, se puede acceder a otras dos salas, atravesando la cocina: la "trastienda", con su gran chimenea encendida en invierno, o la sala de arriba, más a menudo reservada para grandes mesas y grupos. Pero, sea cual sea la sala, siempre encontrará el mismo ambiente rústico: mesas con manteles y servilletas de cuadros rojos y paneles en las paredes.

¿Y la cocina? Los "viejos clientes" le dirán que pasan los años y que tampoco ha cambiado nada Y con razón... Olivier Durand, nuestro Chef, lleva 20 años trabajando en este restaurante, donde empezó como aprendiz bajo la dirección de Justin Lopez, el propietario del local en aquella época. El mismo que dio su estilo a La Tomate, y que creó algunas especialidades ineludibles: La croûte au roquefort, un pan de molde tostado, queso roquefort, un huevo frito y salsa de tomate. El Lolo de ternera, plato que le valió la Sartén de Oro en 1973, y la más tradicional cassoulet con confit de pato o la sopa de pescado, todo hecho en casa. Hoy en día, Olivier perpetúa este saber hacer y se le puede ver cocinar cuando se cruza la cocina hacia la trastienda.
Todos estos platos presentados en los menús suelen calificarse de copiosos. Ir a La Tomate es como ir a casa de la abuela. La cocina es tradicional y sencilla, pero todo es casero, desde el entrante hasta el postre. ¿Y qué decir de los precios? El restaurante siempre se ha considerado en la categoría de "barato". Esto sigue siendo cierto hoy en día, ya que se puede almorzar con un menú completo por 8,90€ y cenar a partir de 12,90€. Lo mismo ocurre con el vino, pero como en casa de la abuela, ¡sólo hay un vaso para el agua y el vino!

Esta es la historia de este restaurante en pocas palabras. Sólo llevo al frente desde 2004. Cuando lo compré me pareció obvio que no había que cambiar nada Lo conocí cuando era estudiante en Montpellier y nada me predestinaba entonces a convertirme un día en su propietario. Hoy, por casualidad, estoy orgulloso de dirigir esta institución y de rodearme de un equipo compuesto por Olivier y Tony en la cocina, y Alexandra y Mathieu en el comedor.

Así que les espero con mucho gusto para que vengan a degustar nuestros platos, que son el orgullo de la cultura culinaria francesa, y si les apetece hacerme la pregunta "¿por qué el Tomate?", les responderé que no lo sé..