Parqué, arabescos, espejos, luces tamizadas, mesas y sillas de hierro forjado abajo, mesas y asientos bajo en el altillo. Al Andalus seduce por su ambiente flamenco y los azulejos de azulejos de su fachada. A menos que sean los dos cuadros negros, a ambos lados de la puerta, que indiquen los dulces nombres de "tapas casarás" (tapas caseras), sangría y "animado Cruzcampo" (la cerveza de Sevilla)… A pesar de este ambiente auténtico que promete mucho calor y convivencia, el trato es bastante distante, el servicio al mostrador no ayuda. Se han visto lugares tan exitosos como aquí, donde los servidores servían a la mesa sin hacer tintar a un desatador para anunciar que está listo… Se celebran conciertos todos los jueves, viernes y sábados, pero a la hora española: antes de las (y es pronto), sólo se escucharán rondas y otros acuerdos de guitarra. La relación calidad-precio de las tapas y de los consumos propuestos es bastante buena, pero esta joven dirección sólo mejoraría.
Este establecimiento también figura como :
DES thème différent tout les jour
Prix des verres hyper interessant vue la contenance
Je recommande vraiment
Seule point négatif
L’entrée pour l’es garçon les jours de fin de semaine est payante
En achetant une conso vous obtiendrez un tampon vous permettant de rentrer
Et avec ce tampon vous pouvez aller à la boîte relier « le club »