¡Qué bonita casita que alberga este restaurante de especialidades culinarias del Gran Oeste! Se despliega en varios espacios encalados -desde la sala de espera con su sólido mostrador de madera y su sofá, hasta la gran sala de servicio al aire de la cantina bretona pasando por las cocinas abiertas- y se seduce rápidamente por el ambiente familiar del lugar. Las galletas y crepes son la continuación lógica de los acontecimientos: se puede disfrutar de una combinación de recetas caseras, todas compuestas a partir de productos muy frescos y sabrosos. Por ejemplo, el diablo (huevo, chorizo y queso fundido) y la Leyenda (huevos, filetes, champiñones, cebollas, queso y salsa de tomate) en plato principal. Las crepes azucaradas, decretadas según la gastronomía, son un delirio. Una comida en la pequeña terraza a la sombra de la antigua construcción está pensada para los días soleados. Sidras, vinos y digestivos del suelo. Se organizan eventos y conciertos. Un lugar muy agradable donde se recibe una calurosa bienvenida.
au plaisir de vous retrouver bientôt ????
Très bon accueil, des crêpes délicieuses.
La prochaine fois, on vient avec les enfants.
Merci ☺️
c'est avec grand plaisir qu'on accueillera la famille au grand complet !!!
a très bientôt ????
J'y vais depuis des années et toujours aussi bon
Je recommande fortement
toujours un plaisir de vous recevoir