LA PERLE
Digámoslo sin rodeos: La Perle es el aperitivo más moderno de París. Aunque te parezca un viejo café todo lo que hay más PMU, perdido en la parte desierta de la calle Vieja del Templo, alejado del bullicio comercial del Marais. De cerca estarás de acuerdo. Totalmente "en su jugo", formica, lámparas naranjas naranjas y paredes llenas, te cruzas con más intermitente que en una bandeja de rodaje. Toma de asalto a las 18 horas por el todo-París. Es bonito, alegre, un poco me has visto, se intercambian planes de veladas, se critica al parisparis, donde se van todos los días, las camareras hacen la uno de Technikart y nadie oye el juke box. En verano, la terraza que bordea el bar está blindada de una pequeña muchedumbre, una copa en la mano, una forma vernácula moderna. El servicio es más que agradable y el ambiente festivo… y los precios realmente asequibles.