JEAN-PAUL HÉVIN
Esta dirección también alberga el salón de té Juan Pablo Hévin de la capital. La ocasión de degustar, in situ, tesoros pasteleros que hacen una gran parte de chocolate. Elegido Mejor Obrero de Francia en repostería-confitería del año 1986, este artesano apasionado, dotado de un gran sentido de los negocios, abre en la primera tienda parisina. Hoy es líder de una verdadera red de tiendas en París y en Japón. Su estilo sobrio le merece un éxito constante. Sus chocolates son todos divinos, ganaches extra negros, pralinados y chocolates con leche, bajados en varias líneas, especiadas, frutales, caramelos y licores. Lo más difícil es elegir. Si quieres un buen sabroso, dirígete a la primera planta de la tienda, el chocolate caliente es sublime y bien cocido.