LE ZÉNITH
Es muy difícil encontrar a un artista de algún renombre que no indique un paso por El Zénith. Bien en cabeza de cartel, bien en un festival, una fiesta de apoyo a esto o eso. La programación se centra principalmente en todas las formas de músicas populares: canciones, rock, reggae, rap… A cada concierto de imponentes cruces atraviesan una buena parte del parque de La Villette para llegar a esta extraña construcción hecha de una estructura metálica cubierta de una tela plateada. En el interior, puede acoger hasta mil personas. La sala es modulable. Por tanto, puedes encontrarte en un espacio más o menos amplio, con asientos escalonados o paseos. Una de las ventajas del Zénith es que la visibilidad sigue siendo correcta. Nunca hay más de 50 metros entre ustedes y la escena.
El Zénith es el primer nuevo equipamiento que abrió sus puertas en el parque de La Villette. Inaugurado en 1984, es obra de los arquitectos Philippe Chaix y Jean-Paul Morel. El primer artista que se ha producido es Renaud. Fue el Ministro de Cultura de aquella época, Jack Lang, quien se creó. Desde hace mucho tiempo, la capital necesitaba un gran espacio para que puedan organizarse grandes conciertos para los jóvenes. Hubo otra instalación destinada a las músicas eléctricas y cabelleras: el hipódromo de Pantin, una carpa donde desfilaron las mejores formaciones de los años 1970, babas, hard y punk, de Gong en The Clash, pasando por Trust. Barbara también pasó. Pero acaba por ceder el paso a este Zénith, cuyo concepto se encuentra hoy en día en grandes ciudades francesas.