SUBLIM EIFFEL * * *
Cómo llegar y contactar
Hotel en el que París y la Torre Eiffel son el centro de atención en el vestíbulo, las habitaciones con vistas a la torre y la suite con jacuzzi.
Un hotel a la gloria de París y de su torre Eiffel es la primera impresión que se entra en el vestíbulo, cuyas grandes cristaleras abren por lo demás en el tren aéreo de la línea 6. La Dama de Hierro está presente en las fotos que adornan las paredes y en la suite Jacuzzi, donde una torre Eiffel de fibra óptica domina la cama… Pero no es la única estrella. El arquitecto ha colocado la ciudad en las habitaciones: moquetas que reproducen pavimentadas y bocadillos de alcantarillado en los pasillos o planos de los siglos 15 y 7 de París en tierra, cabeceros en forma de túnel de metro, mesitas de noche con aspecto de camarotes te dan el toque hónico, ropas de cristal ahumado, fibra óptica artificial en los cuartos de baño. Cada habitación tiene su color dominante tanto para el mobiliario como para los tejidos. A partir del 4 º piso las habitaciones tienen vistas a la torre Eiffel y algunas se retienen al año. En cuanto al bar, es de cristal y tejidos coronados por no hacer ruido. Una decoración urbana de las más modernas, con sus colores y sus iluminaciones galvanentes y delicados olores difundidos en el centro de bienestar…
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre SUBLIM EIFFEL
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Leider war mein Aufenthalt nicht angenehm. Beim Duschen gab es ein Wasserleck, und das Wasser konnte nicht richtig abfließen. Sobald ich die Tür öffnete, floss das Wasser auf den Teppich und in den Bereich des Waschbeckens. Das war wirklich unangenehm.
Außerdem wurde das Bettlaken nicht gewechselt! Ich habe es bemerkt, weil ich Croissant-Krümel auf dem Bett hinterlassen hatte und sie später noch dort waren. Das war wirklich ärgerlich, besonders weil einige Kissen auf den Teppich gefallen sind, der wahrscheinlich durch das Wasserleck feucht war – und ich habe darauf geschlafen!
Mein Gott, wie unangenehm! Alles, was man in einem Hotel will, ist ein sauberes Bett und eine funktionierende Dusche. Leider war das hier nicht der Fall.