En Saint-Aignan, en el corazón de la región Centro, un lugar imperdible con unos 6.000 animales y especies únicas en Francia.
Hace cuarenta años se creó el pequeño parque ornitológico de Beauval, en el corazón de la región de Loir-et-Cher. Con el paso de los años, ha ido creciendo con las llanuras verdes, entre ellas la dedicada a los elefantes, la llanura asiática dedicada a los rinocerontes, antílopes y tapires, luego el vivario en el invernadero tropical de los grandes simios, al que se añadieron el invernadero de los gorilas y manatíes con el estanque de las pirañas, el estanque de los koalas y canguros y un acuario. Con las cuencas panorámicas de los leones marinos y los pingüinos, las islas para los lémures y la zona dedicada a los de China, las pampas sudamericanas y la sabana africana, la superficie ha crecido hasta las 40 hectáreas. Siguiendo su sueño hasta el final, la fundadora construyó uno de los zoológicos más bellos del mundo, que alberga cerca de 35.000 animales y 800 especies en unas instalaciones extraordinarias. Así se creó un ZooPark donde los animales se sienten sobre todo como en casa, y donde una especie en particular ha dejado su huella en Beauval: el panda gigante.
Venga a recorrer el mundo en veinte territorios para vivir una experiencia sin igual, descubriendo la biodiversidad y sus maravillas. Cerca de la entrada, descubra la pasión que dio origen al parque: las aves. Guacamayos, microgallos, cacatúas... Una gran variedad de aves de plumaje colorido y cantos armoniosos.
Pase bajo la verja roja y dorada para entrar en el territorio de los pandas gigantes. Símbolos de la amistad entre Francia y China, son también embajadores de la conservación de las especies. Al llamar la atención sobre el estado crítico de la biodiversidad mundial, los pandas gigantes, únicos en Francia, sensibilizan sobre la necesidad de proteger las especies animales. Un viaje a los confines de China, rodeado de gigantescos espacios verdes e impresionantes edificios chinos. Conozca a los pandas gigantes, los pandas rojos, los leopardos de las nieves y los takines.
Entre en la fantástica cúpula, un extraordinario paraíso para la conservación de especies. La temperatura se mantiene a 26 °C todo el año gracias a sistemas automatizados que garantizan la ventilación y humidificación en función de las condiciones meteorológicas exteriores. La cúpula respira, suda y proporciona a los animales que viven en ella un clima tropical ideal para su bienestar. Anacondas, ibis rojos, nutrias gigantes, manatíes, tamarinos león dorado, dragones de Komodo... Conozca a los pequeños monos, probablemente una de las especies más monas de la cúpula ecuatorial: el saimiri. A través de una cámara, sea espectador de su llegada a la cúpula, de su aclimatación a su nuevo entorno y a sus nuevos congéneres. A continuación, sumérjase en el descubrimiento de una fauna acuática extraordinaria. Las 19 piscinas y acuarios le permitirán observar, como en ningún otro lugar, numerosos animales acuáticos: manatíes, nutrias gigantes, hipopótamos pigmeos, tortugas, pirañas, caimanes..., así como multitud de peces tropicales. Descubra estas especies en espacios lo más parecidos posible a sus entornos naturales, adaptados a cada una de sus necesidades.
Beauval cuenta con una clínica veterinaria única en Europa, verdadero motor de la investigación y la conservación de las especies animales. El ZooParc estudia soluciones para el desarrollo sostenible y la gestión ecorresponsable de su actividad.
Beauval Nature apoya a la ONG Komodo Survivial Program (KSP), que ha firmado un memorando de entendimiento con la Oficina Central Indonesia para la Conservación de los Recursos Naturales que le permite supervisar y actuar para la protección del hábitat natural del dragón de Komodo, amenazado por la expansión de las actividades humanas. Beauval se compromete a colaborar con ellos para proteger a este terrorífico y cautivador gigante.
Disfrute de una experiencia inolvidable participando en las actividades del parque, para descubrirlo de una forma única. Acompañado por equipos de mediadores científicos, participe en el cuidado de los animales (alimentación, limpieza de espacios, creación de enriquecimientos...). Juegos y libros de exploración y talleres educativos completan la visita.
En el fabuloso marco del anfiteatro acuático, venga a admirar y aplaudir a los ágiles leones marinos. Estos fantásticos acróbatas compiten en destreza y equilibrio durante el espectáculo Sea Lions Odyssey Un momento mágico para aprender, en familia, a proteger el medio ambiente. Para descubrir el espectáculo Les Maîtres des Airs, tome asiento un momento en el corazón del anfiteatro de las aves para asistir a un fabuloso espectáculo, donde más de 500 aves se mueven con gracia por encima de sus cabezas, en un hemiciclo de 3.000 plazas. Búhos, grullas, pelícanos, cigüeñas y muchos otros se unen al ballet aéreo de aves rapaces para un espectáculo ornitológico inolvidable.
Quince zonas de restauración le esperan, desde el autoservicio a la crêperie, pasando por la comida rápida, hay para todos los gustos. Y gracias a la aplicación Beauval, con sus funciones adicionales, podrá planificar su visita a su antojo para encontrar los puntos de restauración y divertirse con la sección de juegos. Beauval también se ha rodeado de hoteles, para disfrutar aún más de este maravilloso mundo.
La nueva gran pajarera sudamericana, la más grande de Europa, enriquecerá aún más su estancia sumergiéndole entre el cielo y la tierra, entre las aves de colores y con vistas a los mamíferos desde lo alto de las pasarelas.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Los puntos fuertes de este establecimiento:
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Opiniones de los miembros sobre ZOO PARC DE BEAUVAL
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Le zoo est immense, les animaux évoluent dans des enclos spacieux et sont magnifiques.
Quel bonheur de pouvoir observer pandas et koalas !
Nous avons pu circuler très facilement dans le zoo avec notre poussette, les chemins accessibles sont très bien indiqués.
Le pique nique est interdit dans le parc mais les gens ne respectent pas la consigne. Des tables sont disponibles à l'entrée du parc.
Pour les spectacles, venez faire la queue à l'avance, c'est rapidement noir de monde !
Celle-ci débute donc par quelques oiseaux comme des flamants rose puis on pénètre dans la splendide serre aux oiseaux où on peut apercevoir un paresseux, différents oiseaux se déplaçant au-dessus de nous, dans une atmosphère tropicale. Puis ce sont des enclos avec oiseaux, rapaces, une zone joliment aménagée avec espaces fleuris. On peut ensuite aller voir le grand espace avec rhinocéros, zèbres, girafes qui est super. On y voit très bien les animaux. On peut passer par les endroits intérieurs ou on voit les "petits", sympa. Les félins ensuite, c'est particulièrement agréable. Le tigre blanc est notamment à ne pas rater : il est magnifique, énorme (on s'en aperçoit lorsqu'il passe devant nous derrière la vitre !) et c'est l'une des stars du zoo. Il a une étendue d'eau et lorsqu'il y va, c'est mémorable.
Il y a également des jaguars dont un noir, des tigres aux couleurs classiques. Petit conseil : soyez là lorsqu'on leur apporte de la nourriture car on les voit bien en mouvement et c'est toujours assez impressionnant. Si vous êtes encore là au zoo à ce moment-là, allez-y en fin de journée avant de sortir car il y a une atmosphère vraiment particulière : les félins montrent qu'ils ont faim, sentent sans doute le moment venir et ils rugissent de manière incroyable ! Un super moment à vivre et de sacrés bruits qu'on ne pourrait peut-être pas soupçonner. Magique. Le lion a notamment poussé des rugissements dont je me souviendrai toujours. IM-PRE-SSIO-NANT !! Ça résonnait de façon incroyable et, alors qu'il était pourtant à une dizaine de mètres, on aurait cru qu'il était juste à côté. Dans cette zone, il y a également un ours, des manchots.
Pour en revenir à la visite, après cet espace félins, on peut casser la croute. Les prix ne sont évidemment pas donnés. Puis, il y a l'espace des singes avec un gorille énorme. Il y a des lamantins dans un grand bassin, différents gros poissons... On peut ensuite prendre la direction de l'espace Asie et bien sûr ses célèbres pandas. Alors, arrivés là, il faut être patients car ils dorment beaucoup, ou chanceux car on peut les voir en mouvements, notamment lorsqu'ils sont nourris de bambous. Encore une fois, n'hésitez pas aussi à revenir un peu plus tard si vous n'avez pas pu bien les voir. C'est ce que j'ai fait alors que je pensais quitter le parc et j'ai bien pu les voir à l'extérieur. Ils étaient bien en vue et c'était sacrément chouette. C'est assez fascinant d'observer ces animaux rares... On dirait vraiment de grosses peluches. Dans leur espace intérieur, ils peuvent être drôles lorsqu'ils lézardent ou dorment. Inoubliable. Après les pandas, on peut voir les éléphants dans un grand espace, des petits kangourous, suricates, koalas... La visite peut largement se faire en une journée. Le site est superbe. On passe une excellente journée et on en a vraiment pour son argent.