PUENTE DE LA TOLERANCIA
Maravilla medieval a descubrir en Beaugency, este puente heterogéneo de 24 arcos salva el Loira.
El puente, de 460 metros de longitud y veinticuatro arcos, es la continuación de la primera construcción, que se sabe tuvo lugar en el siglo XI. En la Edad Media, el puente viejo era el único, junto con el de Gien, que salvaba el Loira, que en aquella época constaba de dos puentes que partían de cada orilla y estaban unidos por un puente levadizo. Completamente rediseñada en el siglo XVI, partes de ella aún son visibles hoy en día. La parte principal de la estructura, construida tras la inundación de 1608, causó daños considerables al primer puente de piedra. Otros episodios sucesivos, hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, consistieron en configurar un puente heterogéneo formado por arcos apuntados, semicirculares o en forma de cesta para que la marina del Loira, rica en transportes hasta el siglo XIX, pudiera navegar sin ambigüedades. Dicho esto, las raíces medievales permanecen, hasta el punto de que ha perdurado una leyenda desde su construcción. En una época en que los habitantes tenían que cruzar el río en barca, el propio diablo se ofreció a construir un puente de piedra en una sola noche, a cambio de la primera alma que lo cruzara. El primer magistrado de la ciudad, que era refinado y algo listo, arrojó un cubo de agua sobre un gato a la entrada del puente. El diablo, enfurecido, pateó entonces uno de los arcos, mientras llamaba a los habitantes "gatos de Beaugency", nombre que aún se utiliza hoy en día. James Joyce encontró divertida esta leyenda y la relató en un libro infantil deliciosamente humorístico dedicado a su sobrino Stephen(El gato y el diablo).