Los mejores hoteles Montenegro

Hotel situado en un edificio sin alma pero con la ventaja de su céntrica ubicación a unos veinte metros de la playa. Dispone de piscinas exterior e interior, sauna, así como de varios bares y un restaurante, además de una amplia y bonita terraza con vistas al mar. Como particularidad, cuenta con una sala de billar y una bolera. Las habitaciones son estándar con aire acondicionado y minibar, y balcones con vistas al mar o a la montaña. En el vestíbulo hay un cajero automático.

Un hotel de cuatro estrellas a la americana. Antiguo hotel Lipka, el grupo Sheraton reabrió este establecimiento en la primavera de 2017. Las habitaciones, de distintos tamaños, se han reformado en madera local para que parezcan chalés de montaña. Restaurante muy decente. Atención profesional. Spa, gimnasio, alquiler de material de esquí. Salas de conferencias y salones funcionales y elegantes. Perfecto para reuniones de negocios y seminarios. La imponente entrada y el edificio recuerdan más a un centro comercial estadounidense.

A solo cincuenta metros del casco antiguo de Budva, el Avala Resort es un establecimiento único que ofrece una experiencia vacacional de prestigio. El complejo cuenta con dos piscinas al aire libre, un gimnasio y un gran spa con piscina cubierta abierta. También hay dos restaurantes de cocina internacional. Las habitaciones, de diseño minimalista, ofrecen magníficas vistas al mar o a la montaña y están equipadas con TV de pantalla plana y conexión Wifi. Las habitaciones son realmente suntuosas, aunque un poco caras.

Situado a unos pasos de la plaza principal de la ciudad, dentro de una pequeña galería comercial, este establecimiento ofrece habitaciones algo oscuras, aunque bastante amplias y confortables, con duchas de masaje y opción de sauna; además de aire acondicionado, teléfono, minibar y televisión por cable. Habitaciones accesibles para personas con movilidad reducida (ascensor). Acogida amable y se habla inglés. Posibilidad de traslado al aeropuerto. Kerber es uno de los establecimientos bed & bike equipados para acoger a ciclistas.

Situado a pocos metros de la playa, este hotel ocupa un edificio de tres plantas. Sus habitaciones y cuartos de baño son pequeños, pero ofrecen las comodidades más habituales. Los apartamentos, de 30 m² de media, disponen de cocina americana y balcón. Aunque algunas habitaciones podrían renovarse, el hotel goza de una ubicación ideal (cerca del centro de la ciudad y de la estación de autobuses), tiene un personal muy amable y sirve un buen desayuno. El establecimiento dispone de wifi y aparcamiento gratuitos.

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Este hotel familiar ocupa una pequeña casa de ladrillo justo detrás de la oficina de correos y la comisaría de policía. Aunque muy funcionales, las habitaciones son muy cómodas y cálidas. Además, el personal es agradable y acogedor. El hotel cuenta con un bar lounge, habitaciones familiares y habitaciones para fumadores. Dispone de zona de juegos para niños, wifi y aparcamiento gratuito. A las habitaciones del hotel les vendría bien un poco de redecoración, pero el precio sigue siendo muy atractivo para la región.

Este establecimiento es a la vez un hotel y un centro de talasoterapia. El complejo, que data de la época de Yugoslavia, permite viajar en el tiempo. Merece la pena visitar el hotel aunque sólo sea para "admirar" el modernismo socialista de principios de los 70 y su anticuada decoración interior. Los servicios ofrecidos incluyen masajes, terapias aromáticas y tratamientos de rejuvenecimiento corporal. Dentro del complejo, también es posible visitar Villa Galeb, una de las residencias del mariscal Tito.

Este es uno de los hoteles más nuevos de Žabljak, situado a la entrada del Parque Nacional Durmitor. Se trata de un magnífico chalé moderno que ofrece todo el lujo y la comodidad que necesita después de una gran caminata. Guarda una relación calidad-precio excepcional para este nivel de servicio. Las habitaciones están muy bien decoradas. El restaurante ofrece cocina local con un toque especial, así como una selección de vinos internacionales vanguardista y accesible para todos. También hay una zona de relajación con bañera de hidromasaje, spa y masajes. Su dinámico equipo le atenderá con esmero.

Un albergue ecológico donde, por unos días, podrá convertirse en un Gorštac, un auténtico habitante de las montañas de Kolašin. En el macizo de Bjelasica, a 1800 metros de altitud, podrá cortar leña, ordeñar vacas o elaborar el queso de la región, así como conocer las antiguas técnicas de hilado de la lana o escuchar el sonido de la guzla, un instrumento de una sola cuerda. El programa también incluye paseos a caballo o en bicicleta de montaña y caminatas hasta los picos del parque nacional. Cabañas de 2 a 7 plazas, electricidad y confort garantizado a precios inmejorables.

Sin duda, el alojamiento más hermoso de Žabljak Situado a pocos kilómetros del centro de la ciudad, este ecolodge ofrece una vista impresionante del Parque Nacional Durmitor. Nada se interpone a la vista, y la espaciosa y despejada zona de estar común le da el soplo de aire fresco que ha venido a buscar. Los pequeños y cómodos chalés familiares privados ofrecen una gran intimidad. Los dueños son muy amables y estarán encantados de enseñarle los senderos del Durmitor, su gastronomía y el estilo de vida de la región. ¡Un flechazo!

Situado en un pintoresco valle a la entrada del Parque Nacional Durmitor y antigua residencia de caza de Tito, Ravnjak es ahora un hotel y restaurante. A Tito le encantaba cazar jabalíes, osos y rebecos en esta región. El hotel dispone de seis habitaciones en el edificio principal y tres cómodos bungalós. El restaurante tiene una gran terraza panorámica por encima del manantial, lo que permite a los huéspedes disfrutar del sonido del agua y ver cómo el manantial se convierte rápidamente en un arroyo y luego en un impetuoso torrente.

A solo un kilómetro del centro de la ciudad hay un magnífico parque, una colina arbolada donde pasear y respirar aire fresco tras la lluvia. Con solo ocho habitaciones, ofrece los servicios de un hotel de cuatro estrellas. Sus habitaciones están bien equipadas, con una decoración de lujo y amplios cuartos de baño de estilo italiano (con bañeras de hidromasaje en la primera planta). El restaurante, con unas vistas impresionantes, ofrece un servicio impecable. En la parte trasera, hay una amplia terraza con una gran selección de cervezas, decoración setentera y música rock-folk yugoslava.

Ziya es un hotel-boutique con veinte habitaciones, incluidos estudios y apartamentos. Aquí puede disfrutar de un centro de salud y de un restaurante libanés con deliciosa comida, todo ello en una enorme y elegante villa situada en un parque vigilado. Las habitaciones son bonitas y están bastante bien equipadas. Encontrará comodidad y encanto en un ambiente verdaderamente especial y único. Los propietarios son encantadores y le harán probar las delicias de Oriente. En el corazón de la meseta montenegrina, ofrece un momento de evasión en el Líbano.

Se trata de un hotel reciente, bastante moderno, con restaurante y bar. Cerca del centro de la ciudad, sus habitaciones son amplias y están equipadas con TV de pantalla plana, aire acondicionado y escritorio. El hotel también cuenta con una tienda y un salón. Hay aparcamiento y conexión wifi gratuitos. A solo diez minutos a pie del centro de la ciudad y de la primera playa de guijarros, el hotel es famoso por su hospitalidad y limpieza. Ofrece un entorno bastante romántico con hermosas vistas al mar tanto desde el restaurante como desde las habitaciones.

El hotel, una fortaleza de dos mil años de antigüedad, parece dominar la ciudad con sus impresionantes vistas desde la terraza del restaurante y la piscina. En el aparcamiento público, le recogerá un vehículo eléctrico que le llevará por un laberinto de callejuelas antes de llegar al corazón de esta construcción, todo piedra y vigas, que parece el escenario de un drama. Las habitaciones disponen de todas las comodidades modernas y de balcones con vistas. Está cerca del puerto, del centro histórico y de las playas de los alrededores. Se puede reservar para seminarios o bodas.

Inaugurado en 2014, en este hotel todo se mantiene en perfecto estado. Situado a las afueras de Ulcinj y a dos kilómetros de una playa de arena, cuenta con piscina al aire libre, bar y restaurante. Ofrece alojamientos con aire acondicionado, TV, una pequeña cocina, nevera y baño privado. La bonita terraza da a la piscina y el bar sirve bebidas locales. Los niños pueden jugar en un parque infantil bien equipado. El restaurante del hotel sirve cocina mediterránea tradicional. La conexión wifi y el aparcamiento privado son gratuitos.

En un edificio moderno al borde de la carretera, es el punto de partida de los excursionistas. Cuenta con habitaciones bien cuidadas de decoración acogedora y balcones con vistas a las montañas circundantes; muy agradable después de una caminata activa. El personal es atento y el hotel dispone de piscina cubierta, además de tener una amplia oferta de actividades, como senderismo, equitación y ciclismo. Este establecimiento familiar, limpio, sencillo y sin pretensiones, es ideal para excursionistas, ciclistas, alpinistas... y cualquier persona con un presupuesto bajo.

Hotel nuevo y céntrico situado a quinientos metros de la calle principal (conocida aquí como el «bulevar») y a cien metros del río. De estructura bastante moderna, las habitaciones están equipadas con minibar y TV por cable. Están decoradas con gusto en tonos brillantes, con suelos de madera y cómodas camas extragrandes. Baños modernos y bien equipados. Aparcamiento gratuito y vigilado. El servicio es lento y a veces no se entienden bien las instrucciones, pero sigue siendo decente y con una buena relación calidad-precio.

Convenientemente situado en el casco antiguo, a orillas del río Ribnica, ofrece habitaciones modernas y espaciosas con baño privado. Todas ellas están equipadas con aire acondicionado, TV LED por cable, caja fuerte y minibar. Elija las que dan al río, que son más tranquilas. Dispone de restaurante a la carta y gimnasio. Un lujo en Podgorica: cuenta con aparcamiento subterráneo gratuito para su vehículo. El hotel dispone de salas de conferencias y reuniones, además de tienda de recuerdos en la entrada y un servicio de traslado gratuito al aeropuerto.

Nos encontramos en el campo con una tranquilidad y un encanto absoluto. Este espacio permite alojarse en bungalós de madera rodeados de vacas. Con un restaurante rústico y mucha oferta de actividades. Situado en Hercegova Strana, a 41 km de Žabljak, el Etno Village Milogora cuenta con un restaurante que sirve un desayuno continental. También hay un parque infantil y un servicio de alquiler de bicicletas para explorar los alrededores. Un lugar ideal para parejas.

Este nuevo motel de estilo chalé dispone de setenta camas, es cómodo y limpio, y tiene un restaurante de estilo montañés construido en madera y piedra con una gran chimenea en el centro. Le pueden proporcionar equipo de esquí a partir de siete noches. No admiten animales de compañía. El restaurante es mono y sirve deliciosas especialidades locales en copiosos platos. No muy lejos de los monumentos de interés, se trata de una hermosa propiedad rodeada de naturaleza, muy limpia y con una amable anfitriona. Es un buen sitio para practicar BTT.

Un hotel moderno de tres estrellas. Dispone de restaurante y habitaciones sencillas, pero muy limpias y bien mantenidas. El lugar tiene un ambiente más bien familiar con una cálida bienvenida. La recepción está abierta las 24 horas del día durante todo el año. Si tiene el sueño ligero, quizá prefiera las habitaciones de la parte trasera del hotel, más tranquilas y silenciosas. El acceso a Internet es gratuito en el hotel. Todas las habitaciones disponen de caja fuerte, secador de pelo y minibar. El restaurante ofrece una cocina variada con especialidades de la región.

Conjunto de cabañas situadas en una posición dominante en medio de la vegetación, con magníficas vistas sobre el valle de Mojkovac. Cabañas familiares con habitaciones cómodas, pero pequeñas y a veces mal distribuidas, con una decoración básica. El restaurante es bueno, aunque la carta no es muy variada. Con un personal bastante amable, su principal atractivo es la ecléctica oferta de instalaciones: piscina cubierta, sauna, gimnasio, pista de tenis y de baloncesto, todo incluido en el precio. Ofrecen paseos en helicóptero y cursos de equitación de una semana bajo petición.

Una etnoaldea en medio del bosque, a un kilómetro de Plav. Situado junto al lago en un entorno tranquilo, el hotel ofrece habitaciones dobles y apartamentos de estilo rústico (con kílims en el suelo y las paredes). Tienen suelo de parqué, paredes de piedra y TV de pantalla plana por cable. Mención especial a la decoración de la taberna, muy auténtica con sus muebles de madera. Ofrece excursiones y acceso privado al lago, con playa y campo de fútbol. Sin duda, le garantizan el descanso.

El hotel Astoria disfruta de una buena ubicación en la calle principal del casco antiguo de Budva. Se trata de un edificio medieval que combina una decoración moderna con colores pastel en un ambiente cálido y acogedor.

El hotel dispone de varias suites y habitaciones dobles, todas ellas equipadas con lujosas comodidades, amuebladas en un estilo moderno con un toque de decoración contemporánea. El hotel cuenta con una playa privada bien cuidada (dispone de tumbonas y sombrillas por un coste adicional) y un servicio de restaurante a la carta.

Este flamante hotel familiar de 4 estrellas está situado en la zona selecta de Petrovac, a sólo 3 minutos a pie de la playa de Petrovac y a 7 minutos a pie de la playa de Lucice. Rodeado de olivos, el hotel ofrece a sus huéspedes unas vacaciones relajantes en un entorno mediterráneo. El hotel está diseñado en un estilo moderno y es una opción ideal para los huéspedes que buscan comodidad y un ambiente íntimo. El restaurante del hotel ofrece cocina local, elaborada con ingredientes frescos de la zona para proporcionar una experiencia gastronómica excepcional.

Situado a tres kilómetros del centro de la ciudad, junto a la carretera nacional Berane-Rožaje, este pequeño hotel de gestión familiar abrió sus puertas en 2006. Ofrece habitaciones sencillas, pero cómodas, con calefacción central y muebles de almacenaje. Destaca por los coquetos balcones de algunas habitaciones; todas ellas tienen su propio cuarto de baño con ducha. Además, ofrece una atención cálida y los precios son muy razonables. En resumen, una buena relación calidad-precio y un buen punto de partida para pasear por las colinas boscosas de los alrededores.

Este establecimiento es de hecho un restaurante con tres habitaciones y donde se puede pasar la noche. Las habitaciones son de un confort rudimentario y el cuarto de baño común, pero la propietaria del lugar es encantadora. Para llegar, puedes tomar la dirección de Gusinje justo antes de entrar en la ciudad (y antes del pequeño puente). El hotel está a menos de 1 km del lado derecho de la carretera.

Completamente reformado hace unos diez años, el Rožaje ya no tiene nada que ver con el hotel socialista que fue. Las habitaciones son espaciosas y muy confortables, con el encanto de los años 1930, así como todo el hotel. La única excepción es la fachada, formada por dos triángulos de cristal ahumado que se supone que representan las montañas. El hotel está muy bien equipado, con sauna (incluida en el precio). El restaurante también está decorado al estilo de los años treinta. Este hotel de cuatro estrellas, todo un éxito, sorprende en esta ciudad apartada del mundo.

Recientemente inaugurado, este establecimiento está situado en una animada calle del centro de la ciudad. Bien cuidado, las habitaciones están bien equipadas, con acceso a Internet, minibar y televisión, entre otros. También han sido decoradas con gusto y son perfectas: no hay ruido, las camas son cómodas y el cuarto de baño es espacioso y tiene todo lo necesario (toallas, jabón, champú). Dispone de un comedor agradable con un ambiente acogedor.
Muy bien situado cerca de la estación de autobuses, el Hotel S es también un cómodo punto de partida para caminatas.

Este establecimiento de reciente construcción está situado a la entrada de la ciudad cuando se llega desde Podgorica por la carretera nacional (a mano derecha). Las habitaciones son funcionales y están limpias, y los cuartos de baño están en perfecto estado. También hay un restaurante tradicional bellamente decorado en estilo rústico. Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunas habitaciones de la planta baja son muy oscuras porque dan a un pasillo. A evitar si se tiene un sueño ligero, ya que el tráfico de la autopista es constante día y noche.

A la espera de ser privatizado, se trata del hotel más grande y céntrico de la ciudad. Las habitaciones no tienen nada de especial, pero están limpias, incluidos los cuartos de baño. Es una pequeña muestra anticuada de socialismo, con sus grandes salas, manteles blancos y personal uniformado; aceptable para una noche corta. Para llegar, hay que girar a la derecha nada más entrar en la ciudad (donde un cartel indica «Centar»). El hotel está unos diez metros más adelante, a la derecha, frente a las oficinas del Montenegro Banka.

Esta es una forma realmente única de aprovechar al máximo los encantos del Parque Nacional de Biogradska Gora. En un paisaje idílico, al borde del bosque, se sentirá como en un nido acogedor. Varios chalés de madera con dos o tres camas, cada uno situado en el bosque justo al lado del lago Biogradska. Por la noche, disfrutará de una gran tranquilidad y del estimulante aire de la montaña. También, a pocos metros, hay un café-restaurante que sirve especialidades locales. El lugar ideal para los amantes de la montaña, ya sea al principio o al final de sus excursiones.

Este camping dispone de cinco pequeñas cabañas de madera, con dos camas cada una, situadas entre Međjuriječje y Kolašin, tres kilómetros antes del monasterio de Morača viniendo de Podgorica. En un entorno bucólico, disfrutará de paz y tranquilidad junto al río. El propietario, Miljan Danilović, también gestiona una pequeña cafetería donde podrá prepararle comidas. Como las cabañas no son visibles desde la carretera, deténgase en la cafetería y pídale que le indique la dirección correcta. El propietario también estará encantado de sugerirle varias excursiones, ya sea a pie por el cañón o en kayak por el río.

De gama media y recientemente renovado por completo, este hotel dispone de habitaciones limpias y muy bien equipadas con aire acondicionado, TV y minibar. También cuenta con un restaurante de cocina local, mediterránea e internacional. Además, hay varias de las llamadas suites presidenciales, que son espaciosas, cómodas y elegantes, con bañera de hidromasaje y cocina totalmente equipada. Ofrece una atención muy profesional y los precios son razonables teniendo en cuenta el entorno. Es un muy buen alojamiento.

Convenientemente situado en medio de la calle principal del centro de la ciudad, el hotel ocupa un gran edificio piramidal. Las habitaciones, que disponen de ascensor, son corrientes, pero tienen un bonito balcón. Todas disponen de TV y minibar, y algunas de las habitaciones de las plantas superiores disfrutan de unas vistas preciosas de toda la ciudad. Comenzaron a reformarlo en 2023, pero no deja de ser un hotel económico con restaurante y bar.

Un pequeño, pero magnífico refugio situado a 2020 m de altitud, al oeste del monte Savin Kuk y cerca del glaciar Debeli Namet. Es cierto que el refugio tiene pocas camas (unas quince), pero ofrece espacio suficiente para dormir una noche con el saco de dormir. Es ideal para los que sueñan con dormir bajo las estrellas, en pleno corazón de uno de los parques nacionales más bellos, con su exuberante vegetación. Los espíritus más aventureros no pueden perderse esta experiencia.

Un hotel agradable, situado en plena naturaleza, en un entorno verde y fresco. Habitaciones pequeñas con cuarto de baño. También hay tres pequeños chalés de madera con vistas al río Bistrica y un restaurante con terraza cubierta.

Este establecimiento deteriorado y el confort rudimentario se encuentran en el pueblo homónimo, a unos quince kilómetros al este de Šavnik. Para llegar desde el centro de la ciudad de Šavnik, primero hay que tomar la dirección de Žabljak y, después de unos kilómetros, la pequeña carretera hacia Kolašin. El hotel se encuentra en el corazón del pueblo y junto a la carretera.

Gran hotel en el centro de la ciudad, situado al final del corzo (calle peatonal) y parcialmente renovado. Las habitaciones son sencillas y funcionales; pregunte por las que están encima de la recepción, decoradas con un estilo acogedor. El atractivo de este hotel es que se vive inmerso en la buena sociedad de Nikšić. Dispone de un restaurante y un bar salón bastante acogedores, con decoración en tonos brillantes. Destaca especialmente por tener la mejor terraza a la sombra de la ciudad, y con su propia cerveza, la Mammut.

En un edificio de 7 plantas, al principio del paseo marítimo, cuando venimos de Petrovac. Habitaciones sencillas, sin sorpresas pero amplias, claras y con balcón con vistas al mar por la mitad de ellas (las otras tienen vistas a la vía expreso y a las colinas circundantes). Pero a este precio, el hotel, construido también bajo la era comunista, espera aún su renovación.

Pequeña pensión familiar situada más o menos en medio de la calle principal que baja a la isla de Sveti Stefan. Los apartamentos disponen de una pequeña cocina, lavadora, microondas y una amplia terraza. Las habitaciones, ordinarias, están muy limpias —algunas tienen vistas al mar—, y están equipadas con frigorífico y aire acondicionado; todas las comodidades necesarias. Cuenta con wifi gratuito y aparcamiento público de pago en la zona. Es una muy buena opción por su ubicación y su trato amable.

Construido en la ladera sobre la playa de Bečići, este reciente e imponente establecimiento ofrece todos los servicios de un hotel de alta gama: decoración, servicio, comodidad y cocina dignos de un hotel de cuatro estrellas.
Las habitaciones son espaciosas, todas con balcón y vistas al mar o a la montaña. Arriba, la piscina exterior ofrece unas magníficas vistas al mar. El hotel también cuenta con un restaurante gastronómico, un bar-cafetería y un restaurante tipo taberna, así como una hermosa terraza panorámica, un spa y una piscina infinita.

Un hotel con piscina cubierta y al aire libre, jacuzzi, sauna y gimnasio. Las habitaciones, con balcón, no son nada extraordinarias para un hotel que pretende ser de lujo. Sin embargo, la lista de actividades que ofrece es impresionante: spa, gimnasio, parque acuático (de pago en temporada alta), restaurantes, discoteca, galería de arte, dos piscinas cubiertas, baños turcos, etc. Situado muy cerca de la playa y de las atracciones turísticas, dispone de coches en alquiler. En resumen, un coloso entre el lujo y el turismo de masas.

Cinco suites situadas en una bonita casa del casco antiguo, frente al puerto deportivo (la recepción se encuentra en la pequeña calle que da al puerto deportivo). Cocina, cuarto de baño, dormitorio doble y salón con cama supletoria. Unas bonitas vistas al mar desde las ventanas (sin balcón). También hay un restaurante asador en la planta baja. No es el lujo, pero sí una buena relación calidad-precio por un encanto seguro.

El camping de Bijela está situado no lejos del hotel Delfin, en la pequeña carretera que bordea el mar. Este camping familiar relativamente pequeño está situado en una zona sombreada, justo al lado de la playa (piedras finas), con una entrada gradual al mar. No podemos dejar de recomendar este camping, tranquilo y limpio.
Hay una pequeña tienda de comestibles cerca del camping donde adquirir comida y un restaurante muy bueno para comer y beber. El propietario es simpático y agradable, y habla inglés con fluidez.

En un gran edificio de 14 plantas situado en el corazón de la ciudad, lo que le da un aire extraño de HLM más que de hotel. Habitaciones amplias y con balcón pero muy desoladas y con un confort sumario. Su renovación está prevista en breve.

Un establecimiento de tipo motel situado junto a la vía rápida y fuera del casco antiguo (en dirección a Kotor, en la encrucijada). Habitaciones funcionales con ducha y pequeño balcón. Un lugar sencillo y realmente no caro para los pequeños presupuestos que disponen de un vehículo. Si está cerrado, dirigirse al restaurante "Palma" al lado, que ofrece habitaciones.

10 mini-chalés punteros, de madera, han sido construidos recientemente y alineados en el centro de la aldea. Con una capacidad de entre 5 y 6 personas, disponen de W.-C./ducha y minibar. Desayuno en el restaurante contiguo.

Aunque un poco alejado del centro, este hotel ofrece una de las mejores relaciones calidad-precio de la ciudad. Situado en un pequeño edificio de dos plantas de construcción reciente, las habitaciones son modernas y una limpieza irreprochable. Todas disponen de aire acondicionado y balcón. En cuanto a la decoración, es un poco kitsch, pero para una ciudad en la que la oferta hotelera es relativamente limitada y los precios altos, este establecimiento ofrece un confort más que correcto. En cambio, una bienvenida muy agradable (inglés hablando).