El Brexit

Durante más de tres largos años, la tensión argumentativa en torno al Brexit entre la opinión pública y los políticos estuvo en su punto álgido. Ahora que es ley desde 2020, el Brexit ya no es el principal problema al que se enfrenta el Reino Unido. Sin embargo, sigue siendo una cuestión compleja, con importantes consecuencias económicas y de otro tipo. De hecho, el Brexit ha tenido muchas repercusiones para las empresas británicas, incluidos cambios en la normativa y la regulación económica entre el Reino Unido y Europa. Por ejemplo, muchas empresas del sector agroalimentario han tenido que cambiar sus procesos y ya no utilizan el término europeo "CE" (producido en Europa), sino "UKCA" (producido en el Reino Unido). El país sigue buscando oportunidades para adaptarse tras su salida de la Unión Europea, evitando al mismo tiempo las grandes divergencias en torno a la normativa europea.
A pesar de ello, el Brexit ha contribuido a remodelar el panorama político del país al poner de manifiesto las divisiones políticas y sociales entre los partidos, especialmente en torno a la pandemia, la inflación, el coste de la vida, la sanidad, etc El propio ex primer ministro David Cameron forzó el referéndum del Brexit en 2016 (que desembocó en la salida definitiva del Reino Unido de la Unión Europea), mientras que sus sucesores Theresa May y Boris Johnson consideraron el Brexit como un "rechazo a la pertenencia a la Unión Europea", pero también como una revuelta contra la situación política y económica. En julio de 2024, el laborista Keir Starmer sucedió al conservador Rishi Sunak como Primer Ministro.

Economía, inflación y coste de la vida

En enero de 2024, el 53% de los británicos cree que la economía es uno de los tres principales problemas a los que se enfrenta el país. En 2023, los tipos de interés bancarios estaban en su nivel más alto (desde 2008) y seguían subiendo mientras persistía la inflación. La guerra en Ucrania no ha ayudado: el precio de ciertos bienes de consumo importados de Ucrania se ha disparado, alimentando la inflación. El coste de la vida ha aumentado drásticamente, y el país se ve obligado a hacer frente no sólo al aumento de los costes de los préstamos, sino también a la supervivencia de las empresas, en particular en el sector inmobiliario, aplastadas por deudas que los prestatarios no pueden devolver. El país tiene que hacer frente a un elevado desempleo, debido en parte a un alto porcentaje de enfermedades de larga duración y a las dificultades económicas a las que se enfrentan las empresas, todo ello a raíz de la pandemia del Covid-19. Existe una verdadera escasez de trabajadores en Gran Bretaña, con más de un millón de vacantes por cubrir. Los europeos han abandonado los empleos, a menudo precarios y estacionales, de la hostelería y la agricultura, y son los británicos quienes los han sustituido.

Inmigración

En abril de 2023, más de la mitad de la población británica cree que debería reducirse la tasa de inmigración. Se trata, obviamente, de un tema divisivo. Aunque el Brexit prometió reanudar el control sobre la inmigración, en 2022 se alcanzó un máximo histórico con 606.000 inmigrantes. Entre ellos hay muchos refugiados ucranianos y de Hong Kong. El partido de la oposición habla de pérdida de control.
En particular, de las pequeñas embarcaciones neumáticas que cruzan el Canal de la Mancha y llegan en masa a territorio británico: 40.000 en 2022. En 2021, el Gobierno puso fin a la libre circulación entre el Reino Unido y Europa e introdujo la obligación de visado para regular el número de llegadas a territorio británico. Como consecuencia de esta medida, en 2022 el país experimentó un descenso en el número de europeos llegados por motivos laborales y, por otro lado, una mayor demanda de visados de trabajo y visados de estudiante por parte de la población china e india, lo que demuestra el atractivo de las universidades británicas.

Salud

La renta de los hogares, las tasas de desempleo, las condiciones de la vivienda... hay una serie de factores que determinan si un país goza o no de buena salud. El Servicio Nacional de Salud (SNS) cumple 75 años en 2023. Desde entonces, el Gobierno ha tenido que aumentar su inversión para garantizar que la población tenga un acceso más equitativo a la asistencia sanitaria. El país lleva años con escasez de personal sanitario, y el gobierno se ha negado a aumentar los salarios, lo que ha provocado huelgas. Muchas personas que padecen enfermedades graves no pueden recibir tratamiento debido al coste de la asistencia. Las listas de espera para tratamientos hospitalarios rutinarios son cada día más largas. En general, el Reino Unido tiene un sistema sanitario deficiente, con un acceso a la atención complejo y caro en comparación con sus países vecinos. Sin embargo, el gobierno está tomando medidas para rectificar la situación.

Medio ambiente

El medio ambiente está en el centro de las preocupaciones británicas. El Gobierno lucha contra la contaminación atmosférica, una de las mayores amenazas medioambientales del mundo. También lucha contra la contaminación acústica y, más ampliamente, contra los numerosos factores que causan problemas de salud física y mental: contaminación, cambio climático, inundaciones, etc. Se han puesto en marcha varias estrategias para combatir los problemas medioambientales: la Estrategia de Recursos y Residuos apoya una economía circular, el Plan Medioambiental a 25 Años ofrece estrategias para preservar la biodiversidad, la Estrategia de Aire Limpio combate las emisiones deCO2 y la contaminación atmosférica con nuevas normativas dirigidas tanto a las empresas como al público en general, etc. Pero tenga paciencia: la aplicación de estas diversas medidas lleva tiempo y los resultados no serán visibles hasta dentro de algún tiempo.

El problema de la vivienda

Uno de los principales problemas a los que se enfrenta el Reino Unido es la vivienda. Una gran parte de la población está mal alojada o no tiene hogar porque sus ingresos son demasiado bajos. El número de viviendas sociales está disminuyendo y se construyen muy pocos edificios nuevos. La vivienda en Inglaterra, sobre todo en las ciudades, es muy cara. El precio medio de una vivienda en Londres en 2024 era de 519.505 libras. El alquiler medio de un piso de dos habitaciones en Londres es de 1.250 libras al mes.

Seguridad

La seguridad es otro de los problemas a los que se enfrenta el Reino Unido. Aunque el país sigue siendo seguro, a la gente le preocupa el aumento de la inseguridad, sobre todo en las ciudades. La tasa de criminalidad ha aumentado más de un 7% desde 2021. Richmond-upon-Thames, Harrow y Bexley se encuentran entre las zonas más seguras de Londres. En cuanto al sureste de Inglaterra, las estadísticas muestran que las ciudades más seguras son Woking, Fareham, Royal Tunbridge Wells, Rochester, Eastbourne y Hastings. En el Suroeste, Exeter, Poole, Plymouth, Bath y Bournemouth encabezan la lista.