Los mejores alojamientos Carretera Del Suroeste

Situado en un edificio de paredes ligeramente ocres, las habitaciones del Palace son amplias y luminosas. Algunas incluso disponen de un imponente baño digno de un... palacio. La serenidad del local se ve reforzada por un hermoso jardín.

Un establecimiento familiar con cuatro cabañas de lujo y seis habitaciones en la elegante guesthouse Virunga Terrace, todas muy limpias y espaciosas, que permiten disfrutar tranquilamente de unas magníficas vistas hacia la selva tropical y los volcanes del Rift la noche anterior al encuentro con los gorilas. Buen restaurante en el que sirven comida de calidad. Trato muy cálido y servicio amable. También pueden organizar una amplia gama de actividades desde el campamento: encuentros con los batwa (25 $ por persona), observación de aves(160 $ por persona), paseos en canoa por el lago Mutanda (60 $ por persona), caminatas hasta las cataratas Suma (30 $ por persona), encuentros con herreros y herbolarios tradicionales (45 $ por persona)...

¡Este establecimiento disfruta de un gran éxito! Las cabañas son sencillas pero espaciosas, bien equipadas y con una excelente relación calidad-precio. La vista del lago es magnífica y el trato es realmente cálido. En el restaurante sirven cangrejos de río. Organizan varias actividades en el lugar (bicicleta de montaña, piragüismo...). Cabe destacar la existencia de una tienda de recuerdos y el magnífico emplazamiento de la zona de acampada, en un sector de la orilla del lago salpicado de palmeras.

El Bird Nest (nido de pájaro) es sin duda el establecimiento más exclusivo del lago Bunyonyi. La main lodge,o casa principal,a la que se accede por un jardín ocupado por un burro, es un verdadero éxito: las habitaciones, con su balcón que da a una cala, son confortables; el restaurante, en la planta baja, está cuidadosamente decorado y constituye el escenario ideal para degustar los famosos cangrejos de río del lago; la terraza, un espacio agradable para tomar una copa mientras se descansa, domina la piscina... El Bird Nest se extiende hasta el otro extremo de la bahía, donde hay una zona tranquila con cabañas: el Bird Nest Eco Overseas. Allí se puede leer tranquilamente un libro de la biblioteca o desayunar en paz; sin embargo, para la cena hay que tomar el bote que lo llevará al lodge principal, al otro lado de la pequeña bahía, en pocos minutos. Además, el Bird Nest ofrece una amplia gama de actividades, como una visita al pequeño pueblo de Bukona para conocer a los herreros que trabajan el metal con técnicas tradicionales. Podrá cambiar moneda en recepción.

El Arcadia es el único establecimiento situado en lo alto y ofrece unas vistas fabulosas sobre el lago y sus islas, así como del paisaje circundante. Sus 25 cabañas son tan acogedorascomo se pueda imaginar. Kai y su equipo, en el horno y en el molino, son muy atentos y organizan actividades en la zona (quads, observación de aves, cruceros por el lago...). Buena restauración.

Situado en la periferia norte del parque (a un kilómetro y medio de la puerta de Nshara), sobre un espolón rocoso con impresionantes vistas de los alrededores, el Rwakobo es un lugar magnífico. Las cabañas, decoradas con pinturas y fotografías, son un éxito, al igual que la espaciosa cabaña de paja que sirve de bar-restaurante y la piscina «incrustada» en el granito. Las instalaciones para los más pequeños (tobogán, columpio), la organización de excursiones en bicicleta y de senderismo (de 10 a 25 $), la cálida acogida del personaly la preocupación ecológica de los diseñadores se suman a sus atractivas características.

Situado en la carretera de Kabale, este hotel ofrece habitaciones limpias, tranquilas y equipadas (TV, mosquitera...).

Situado a una altitud de 1800 metros, el complejo turístico Lake Mutanda está escondido en una arboleda en la pequeña península de Mushongero. Sus dieciséis cabañas, muy agradables, ofrecen todas unas buenas vistas al lago, pero las que están orientadas al sur disfrutan además de una impresionante panorámica de las montañas Virunga como telón de fondo. El bar-restaurante, con su terraza acariciada por los céfiros vespertinos y su agradable atmósfera interior, deleitará a los grandes glotones y a los finos gurmés, ya que su cocina es a la vez copiosa y excelente. También ofrece una amplia gama de actividades: recorrido por el lago Mutanda y sus islas (en particular la isla Mutanda, la más grande y la única habitada), excursión por las orillas del lago Mulehe, visita a la aldea de Mukozi, etc. La compra prevista de nuevos kayaks y la construcción de una plataforma dedicada a la práctica del yoga deberían aumentar aún más la oferta de ocio y relax. En resumen, un establecimiento magnífico.

En una bonita bahía con un jardín bien cuidado y una magnífica vista del lago, el lugar está desafortunadamente desnaturalizado (especialmente visto desde el agua) por una gran extensión de hormigón. Los bungalós y las habitaciones están limpios y bien equipados. Existe la posibilidad de acampar en el jardín en compañía de las cosifas de Heuglin. Disponen de un health club(gimnasio, sauna...) y ofrecen numerosas actividades (senderismo y ciclismo, paseos en barco...). Buen trato. Están situados a un kilómetro, aproximadamente, al sur de Rutinda.

A 600 metros por encima de la carretera, este establecimiento estaba aún al final de nuestra visita, pero a primera vista la tarifa nos parecía excesiva, ya que el conjunto carece de encanto. Las 7 habitaciones, con vistas al bosque, están alineadas en un gran edificio de piedra. Se caracterizan por los muebles de madera (demasiado) esculpidos y las paredes recubiertas de briquetas de granito, una decoración local con un toque kitsch. Está prevista la instalación de tiendas de safari.

Situado a dos kilómetros del centro de la ciudad, cerca de la carretera de circunvalación, este establecimiento ofrece habitaciones desprovistas de encanto pero limpias y funcionales. El jardín, con sus juegos para niños, es agradable. En el momento de nuestra visita estaban construyendo un spa. También hay que tener en cuenta que, por el momento, solo se puede acceder a la conexión wifi en el edificio principal.

Situado cerca de Rutinda, este hermoso lugar es muy popular entre los mochileros y los overland trucks, los safaris en grupo que viajan a través del continente, lo que puede suponer que sea ruidoso algunas tardes. El conjunto es bastante básico, pero la ubicación de las tiendas de safari, con vistas al lago, es agradable. Bar animado. Las actividades incluyen alquiler de canoas, natación, observación de aves, etc. Posibilidad de traslado desde Kabale. Si desea hacer un pícnic en Bunyonyi Overland sin quedarse allí, le costará tres dólares por persona.

Las habitaciones de este hotel, articuladas alrededor de un patio, están equipadas con televisión, mosquitera y un amplio baño. Los apagones son frecuentes en este establecimiento situado en la carretera nacional de Mbarara. Durante el desayuno podrá reponer fuerzas con el fortificante y típico katogo.

El Kalebas estaba en proceso de ser renovado y reestructurado durante nuestra visita. Sin embargo, conservará sus cualidades (tranquilidad, panorama, precios relativamente bajos, etc.), lo que ayuda a mantenerlo en nuestra selección. ¡Usted será el primero en juzgar las nuevas instalaciones!

La madera y las fibras vegetales son los principales materiales utilizados para construir las encantadoras cabañas escondidas entre el verdor de este resort. El restaurante, bajo una choza de paja, es espacioso. Con un poco de suerte verá al único mono que vive en esta isla de 600 metros de largo y 250 de ancho, y en la que se han introducido algunos animales (antílope acuático, impala, cebra) que pueden verse durante un nature walk (45 minutos; 10 $).

Situado en la entrada oriental de la ciudad, este establecimiento ofrece unas agradables, limpias y bien equipadas habitaciones (TV, mosquitera...), al estilo de los moteles norteamericanos. Construido en 1967, es propiedad de un antiguo ministro ugandés y su nombre hace referencia a la empresa italiana del mismo nombre...

El Centro de Vacaciones de Nabugabo cuenta con cabañas totalmente equipadas y limpias, un amplio y agradable camping y una pequeña playa desde la que se puede dar un chapuzón en el lago. El sitio, donde los vervets y los pájaros se divierten mucho, es generalmente tranquilo durante la semana. El personal, muy amable, organiza o ayuda a organizar actividades alrededor del lago (paseos en barco, observación de aves...). Entre el desayuno y la cena, puedes ver a los pescadores trabajando en sus piraguas.

Este refugio es un verdadero remanso de paz en la remota isla de Ha'Buharo, cuyo nombre significa «el canto de los pájaros». Las tiendas de safari, levantadas sobre una plataforma y enclavadas en medio de los árboles, están dispuestas con buen gusto. Materiales naturales y electricidad de origen solar. Sala del restaurante decorada con objetos étnicos. Aunque el lugar sea encantador, es difícil llegar a él (carretera + 25 minutos en barco). El servicio y la comida no siempre están a la altura de los estándares deseados.

Aferrado a la ladera, el Ojo de Halcón (cuyo nombre no está en absoluto usurpado) domina la localidad de Rutinda y la bahía que la baña. El Ojo de Halcón, al que se accede por un camino empinado, cuenta con una hilera de hamacas para relajarse mientras se disfruta de las vistas, cabañas y tiendas de safari limpias y despejadas, y una pequeña piscina de doce lados. El camping es agradable y el personal del albergue puede alquilarte una tienda de campaña si es necesario. El personal organiza muchas actividades. La comida es pasable.

Situado a unos cuatro kilómetros al sur del centro de la ciudad, no lejos de la carretera que conduce a la frontera con Tanzania, este campamentoes muy popular entre los voluntarios y los grupos de jóvenes ugandeses. El lugar es relajante pero sin ningún encanto particular.