Guía de viaje Ajaccio

Capital de Córcega y ciudad de Bonaparte, Ajaccio suele ser la ciudad portuaria de llegada a la isla de la belleza, ya sea en ferry o en avión. A esta ciudad no le faltan atractivos. Para empezar, culturales, con monumentos históricos como el Palacio Fresch, que alberga el Museo de Bellas Artes, o la Maison Bonaparte (museo nacional). En cuanto a la naturaleza, el litoral mediterráneo y joyas como las islas Sanguinarias, ricas en biodiversidad corsa, harán las delicias de los amantes de un entorno preservado. Sobre todo, Ajaccio le ofrece un modo de vida específico basado en los placeres gastronómicos y los momentos de relax en torno a un aperitivo, un baño, la visita a una exposición de arte o un concierto de polifonía corsa. No se pierda una visita a la catedral barroca de Notre-Dame ⁽ siglo XVI), que alberga obras de Delacroix y Tintoretto. Ajaccio es una ciudad pequeña, dinámica, encantadora y turística que requiere varios días para descubrir sus tesoros. Es fácil orientarse por las principales arterias del Cours Napoléon y el Boulevard du Roi Jérôme. Tómese su tiempo para ir a las afueras en bicicleta eléctrica o de excursión. Entre matorrales y maquis, suba a lo alto para disfrutar de magníficos panoramas, incluso de una suntuosa puesta de sol, sobre la ciudad, su golfo y el mar.