LE TABLIER GOURMAND
Como los buenos establecimientos se dividen, Le Petit Futé tenía que hablarte del Tablier Gourmand. Abierto desde hace poco más de un año, este restaurante nos ha reservado un buen momento de convivencia. En este pequeño pueblo de 970 almas, llegamos al único comercio por un tibio por la tarde de septiembre. La fachada no tiene nada de excepcional, pero la recepción es fabulosa: una palabra simpática, un natural que no engaña. En el interior, el entorno es acogedor. Hay que decir que el bar todo de madera, los taburetes cómodos y los cuadros expuestos en las paredes hacen que el lugar sea muy agradable. Pero el Tablier Gourmand es sobre todo una cocina generosa, la de Ludovic Beurdin conocida como Ludo, que propone cada semana una pizarra deliciosa sin florituras. El Ham'Berry, con su salsa de cabra y su ketchup al vino, hace que los amantes de las especialidades locales se derriben. Es bueno saber: las hamburguesas, las tartinas y las pizzas se sirven para llevar. En cuanto a las tarifas, te hacen guardar la sonrisa de la entrada al postre. Un lugar para los amantes de las sorpresas de la campiña.