Posada tradicional con aire alsaciano, platos caseros y carta de vinos
Es una de las mejores direcciones del sur de Alsacia. La antigua posada, reconvertida en restaurante a principios de siglo, destila tradición y es un modelo en su género, con sus entramados y revestimientos de madera que le confieren un fino aire alsaciano. El estilo es rústico, al igual que la cocina, en la que destacan los espárragos de Village-Neuf en primavera. El foie gras es casero y delicioso, servido con un Gewurztraminer. Para los amantes del pescado: rodaballo, lenguado, lubina y salmón ahumado servidos en su propia salsa casera. Para terminar con una nota dulce, pruebe nuestro kugelhopf helado casero. La carta de vinos incluye varietales franceses de primera calidad. Un hermoso jardín de verano le da la bienvenida cuando hace buen tiempo.
La nourriture et le service étaient impeccables.